Politólogos dicen que no está claro el efecto en la opinión pública.

Los analistas políticos consultados por El País coinciden en que es "prematuro" analizar ahora los costos políticos que tendrá la suba del Impuesto a la Renta de las Personas Físicas (IRPF) para el Frente Amplio. El director de Factum, Óscar Bot-tinelli, dijo a El País que "es un poco prematuro" hacer ahora cálculos sobre los costos políticos de una medida que comenzará a regir en enero de 2017.

"Me da la impresión que molestó a mucha gente decir no dejamos de cumplir lo que dijimos en campaña electoral. No son estas cosas las que repercuten, pero cuando uno acumula cositas ... hay que tratar de no acumularlas porque es un oficialismo que viene acumulando demasiado cositas", señaló en referencia a la baja aprobación del gobierno del presidente Tabaré Vázquez.

"Salvo que haya un tema de convicción de principios, reducir recaudación por IVA y compensar por IRPF es un camino que políticamente no genera resultados. Porque por un lado genera molestia y en otra no se nota", explicó Bottinelli.

Para la directora de Cifra, Adriana Raga, "faltan unas semanas para que la opinión pública cristalice estas medidas de gobierno. Depende mucho de la visión de los dirigentes y cómo comunique cada uno el efecto que tendrá". "Depende de cómo comuniquen, ha salido muy fuerte la oposición, pero la gente está muy consciente de que la situación no anda bien. La gente no es irracional y sabe que las cosas no andan bien y tiene temor a la crisis y a la pérdida del empleo", acotó. Raga advirtió que "hay muchos mensajes que ahora están circulando" y todavía no está claro cuál será el dominante en la opinión pública. "El hecho de que el ajuste sea en la clase trabajadora es un factor de descontento, pero hay que esperar", concluyó.

COSTOS POLÍTICOS