Los agentes uruguayos

El libro La StB: El brazo de la KGB en Uruguay, de Mauro Kraenski y Vladimír Petrilák, pone sobre la mesa la documentación que revela que Vivian Trías, el teórico y referente del Partido Socialista uruguayo, fue un agente secreto del servicio de inteligencia checoslovaco (StB) entre 1964 y 1977.

Pero además de hacer un profundo relato de cómo se dio este vínculo, y de los aportes de Trías en esos 16 años u2014remunerados económicamenteu2014 la publicación arroja más novedades respecto a otros nombres implicados en esta red de espionaje a favor del bloque comunista en los 60 y 70.

En un adelanto del libro publicado el domingo pasado en Qué Pasa, se cuenta cómo Trías logró que Alberto Heber Usher, siendo miembro del Consejo Nacional de Gobierno, le filtrara un documento confidencial sobre las relaciones entre Uruguay y Cuba. Sin saber que era para la StB, en marzo de 1965 Heber hizo en el consejo un discurso de contenido antiimperialista redactado por Trías.

Además del intelectual socialista, los principales agentes de Praga en Uruguay fueron hombres de prensa: Guillermo Bernhard (contador y periodista, que llegó a dirigir el semanario Época) y Héctor Menoni, prestigioso periodista de la agencia United Press International (UPI); Menoni fue el agente más duradero: colaboró durante 21 años, en Montevideo y en otras ciudades.

El libro relata la colaboración u2014muy probablemente conscienteu2014 de Alejandro Rovira, quien fuera ministro del Interior, embajador en Israel y canciller durante la dictadura. Este fue el contacto "más fascista" de todos, según registraron los checoslovacos en el archivo. Rovira entregó información sobre los tupamaros y detalles sobre las estructuras del Ministerio del Interior y la policía. ¿Para qué? Ni la StB lo sabía.

También colaboró Alejandro Zorrilla de San Martín, el hijo del político de mismo nombre y nieto del poeta Juan. Zorrilla, como secretario de su padre, aportó información valiosa.

A su vez, Trías reclutó a Alfredo Abete, Enrique Balla, María Elisa Trías y Carlos Machado, haciéndoles creer que era para la inteligencia socialista. Otros que colaboraron: Marcos Brondi, Álvaro García de Zúñiga, José Trelles, Héctor di Biase, Nelson Santos, Barros Lémez.