ENCUESTA

El intendente de Montevideo, Daniel Martínez, y el precandidato blanco Luis Lacalle Pou lideran en simpatía en sus respectivos partidos políticos. Los datos surgen de la encuesta de Opción Consultores que difundió Telenoche de Montecarlo.

Este indicador surge del saldo neto entre la simpatía que recogen los políticos, menos la antipatía que los consultados expresan sobre las mismas figuras.

Martínez tiene una popularidad de +27%, ya que su simpatía es del 45% y la antipatía de 18%. Quien le sigue es el expresidente José Mujica con un saldo de +12%.

La simpatía por el senador del Movimiento de Participación Popular (MPP) es de 46% pero la antipatía es de 34%.

"Mujica es el candidato que recibe más simpatías y antipatías, es el personaje más polarizado en simpatías", dijo Rafael Porzecanski de Opción Consultores.

En tercer lugar en el ranking aparece el senador Pablo Mieres con +11% de popularidad una simpatía de 30% y 19% de antipatía. Luego aparece el senador blanco Jorge Larrañaga con 33% de simpatía, 29% de antipatía lo que da un saldo neto de +4%. Le sigue su contrincante en la interna del Partido nacional Luis Lacalle Pou con 34% de simpatía, 35% de antipatía y un saldo de -1%.

Sin embargo al analizar la popularidad de los políticos entre los electores de cada uno de sus partidos, el líder del sector Todos sobrepasa a Larrañaga.

Lacalle Pou obtiene una simpatía del 81% dentro de los votantes blancos mientras que Larrañaga tiene una simpatía de 69%.

Pero esta relación cambia entre los votantes frenteamplista. Allí el senador del Alianza Nacional se sobrepone ante Lacalle Pou; es decir que recoge mayor simpatía en el electorado frenteamplista.

Por otro lado en la interna del partido de gobierno, si bien Martínez es quien tiene la mayor simpatía en el electorado en general, es superado por el expresidente Mujica si se toma en cuenta solo los votantes del frente Amplio.

El expresidente acumula una simpatía de 87% mientras que el intendente de Montevideo tiene 76%.

Incluso Mujica tiene mejor simpatía entre los votantes indefinidos.