DEBATE

El anteproyecto de la ley de urgente consideración está en manos de los partidos políticos que integran la coalición. Colorados, independientes y cabildantes ya hicieron un primer análisis del tema y tienen reparos concretos sobre algunos puntos importantes vinculados a la seguridad.

Los colorados se reunieron el lunes y volverán a hacerlo hoy. Guido Manini Ríos de Cabildo Abierto inició el estudio del texto el jueves pasado y el Partido Independiente reunió ayer a sus técnicos para lo mismo.

En los tres jugadores de la coalición nacional hay reparos en referencia a los artículos vinculados con la seguridad pública. Por eso, decidieron elaborar un documentos detallado para sentarse a conversar con el presidente electo Luis Lacalle Pou, a quien le presentarán sus objeciones.

Por el Partido Independiente, Pablo Donnangelo fue el especialista en materia de derecho que quedó encargado de elaborar un texto con los puntos que generan discrepancias.

Los dirigentes liderados por Pablo Mieres tienen dudas sobre las medidas donde se impulsa el aumento de penas en algunos casos, así como aspectos vinculados a la minoridad y el delito. Donnangelo, junto con el diputado Iván Posada, terminarán de afinar los puntos donde no hay coincidencias con el borrador elaborado por los blancos.

Lacalle Pou adelantó que el texto puede ser mejorado. Incluso una vez que ingrese al Parlamento -luego del 1° de marzo- el líder blanco aclaró que están abiertos a que el Frente amplio le incluya modificaciones o agregados que sean de consenso entre los otros integrantes de la coalición.

En el Frente Amplio sostienen que el proyecto de ley de urgente consideración tiene una serie de inconstitucionalidades que están a estudio del -hasta ahora- partido de gobierno.

“Hay cosas que no son de urgente consideración dentro de este proyecto de ley y nos parece que le hace mucho mal a la democracia”, declaró días atrás el presidente del Frente, Javier Miranda.