Reforma constitucional
“Es contra la gente que sufre la delincuencia, no contra Larrañaga”, sostuvo.
El Pit-Cnt anunció la semana pasada a El País que encabezará una contracampaña -de la que también formaría parte el Frente Amplio y otras organizaciones sociales- para intentar impedir que se apruebe la reforma constitucional impulsada por el senador Jorge Larrañaga bajo el título “Vivir sin miedo”, y el legislador salió al cruce ayer de la iniciativa que, sostiene, “es contra la gente que sufre la delincuencia, no contra Larrañaga”.
“Esa contracampaña del Pit-Cnt y del Frente Amplio es contra los más de 400.000 uruguayos que firmaron (...) pero también contra víctimas y familiares de víctimas de la delincuencia, las que siempre son ignoradas y que sufren las consecuencias del delito”, sostuvo el legislador al ser consultado por El País acerca del anuncio hecho por Fernando Pereira, presidente de la central sindical.
El tema estuvo sobre la mesa en la reunión que el miércoles pasado mantuvieron el precandidato nacionalista y las autoridades del Pit-Cnt, quienes le advirtieron que no solo se oponen a la reforma constitucional sino que también le anunciaron que la organización hará una campaña en contra de esa iniciativa.
“Le dijimos que no solo no resuelve la inseguridad, sino que puede ser aún más complicado para la sociedad uruguaya. Quedamos de entregarle un documento con nuestra posición, a él y a los otros precandidatos”, explicó Pereira a El País.
Ante esta situación, Larrañaga defendió su propuesta diciendo que “esto lo eligió la gente; el pueblo. Ese pueblo del que tanto se dice identificado el Pit-Cnt y el Frente Amplio. Ese pueblo firmó para que haya Plebiscito. Hagan lo que quieran hacer. Pero sepan que nadie pone la firma para una cosa tan, pero tan republicana, si no está hastiado, harto, impotente, descreído”.
El legislador reafirmó su intención de mantener su propuesta. “Hoy estamos más firmes que nunca. Hoy son miles de voluntades de uruguayos y es contra ellos esa contracampaña”.
La iniciativa.
La reforma constitucional impulsada por Larrañaga plantea la creación de una Guardia Nacional compuesta por 2.000 soldados que tendrían la misión de colaborar en las tareas de seguridad pública. Se encargarán de participar en la acción preventiva, disuasiva y represiva tendiente a impedir la comisión de delitos, principalmente en las zonas del interior con un mayor índice.
También propone eliminar la prohibición de realizar allanamientos nocturnos en viviendas. Se posibilita que los jueces, cuando haya fundadas sospechas de actividades delictivas, puedan ordenar los allanamientos de domicilios en horas de la noche, algo que hasta ahora estaba prohibido.
Por otro lado, el proyecto de reforma prevé que quien cometa delitos graves (tales como rapiña, violación, homicidio, extorsión, secuestro, copamiento, abuso sexual, trata de personas, tráfico de estupefacientes), no podrá recibir beneficios liberatorios y deberá cumplir la pena en su totalidad.
Finalmente, el proyecto también supone la creación de una nueva pena, la reclusión permanente revisable para delitos especialmente graves como violación o abuso sexual seguido de muerte, sicariato y el caso de los homicidas múltiples.
Argumentos.
“Sé que van a decir que Larrañaga quiere militarizar, que quiere poner tanquetas. Sé que van a decir que no a los allanamientos nocturnos porque ‘el hogar es sagrado’. ¡Pero cuándo dejó de ser sagrado como para que se nos metan los delincuentes! ¿Cuándo? ¿Que nos digan cuándo? El hogar es sagrado y el kiosquito también es sagrado, y el almacén también lo es y nuestros hijos en la calle también lo son. Nuestras familias también lo son”, sostuvo Larrañaga anticipándose a lo que supone serán argumentos de los opositores a su propuesta.
En un intento por desarmar el argumento de la militarización de las calles que implicaría la creación de una Guardia Nacional, el precandidato blanco asegura que “los 2000 militares que vamos a poner al servicio de la ciudadanía son buenos militares. Son los mismos que cargan la basura, que meten lomo en las inundaciones, que van a las misiones de paz y que también quieren que sus familias vivan en paz”.
En opinión de Larrañaga el gobierno “ha tenido tiempo, plata y poder para hacer todo lo que dijeron que se tenía que hacer, pero han fracasado. No pueden con los delincuentes afuera ni con los delincuentes adentro, porque en las cárceles mandan los presos. Han fracasado en la rehabilitación, en la prevención y tienen prevenciones a la hora de castigar el delito”.
Para Larrañaga el gobierno “está sordo ante el reclamo de la gente; parece que viven en Saturno. Ni escuchan, ni comprenden, ni hacen lo que tienen que hacer por la gente. No dan la cara. Tienen la obligación de cuidar a la gente y no lo han hecho”.
Finalmente, el legislador dirigió un mensaje a quienes respaldaron su iniciativa firmando por plebiscitar la reforma constitucional, sosteniendo que “quienes quieren cambiar sepan que voy a estar con ellos, que vamos a poner la cara, que cuentan conmigo. Estamos con una gran satisfacción porque hemos puesto a andar un mecanismo de activación ineludible”, y a quienes se oponen a su propuesta los desafió: “Nos vemos en las urnas”.