REUNIÓN EN SUÁREZ Y REYES

En el medio de la mesa estaba el presidente Luis Lacalle Pou. A su derecha, la única intendenta electa por el Partido Nacional, Ana Bentaberri, de San José. Más lejos, en una punta, Carlos Moreira; visiblemente lesionado en su frente por un golpe cubierto con una venda, el intendente electo de Colonia se colocó al lado de su homólogo por Cerro Largo, José Yurramendi. Desde la otra punta los miraba el sanducero Nicolás Olivera.

Fueron 15 los intendentes del Partido Nacional que el jefe de Estado convocó a la residencia presidencial ayer para compartir un asado. Solo faltó el de Maldonado, Enrique Antía, porque está de licencia. Los otros 14 recibieron las felicitaciones de su líder y una “charla técnica” sobre los años que se vienen por delante.

La escena fue una demostración del poder de los blancos en el interior del país. Ganaron 15 de los 19 gobiernos, incluso en lugares donde no eran favoritos.

Antes de la reunión con el mandatario, todos los intendentes fueron recibidos por el directorio del Partido Nacional. El clima allí fue de fiesta. Hablaron todos. Carmelo Vidalín, que logró su cuarto triunfo en Durazno, agradeció el apoyo de las autoridades de gobierno que se apuntalaron las campañas en los diferentes departamentos.

Los que se llevaron los mayores aplausos fueron el secretario de la Presidencia, Álvaro Delgado; el ministro de Transporte, Luis Alberto Heber; el subdirector de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP), José Luis Falero; y el presidente del directorio nacionalista, Pablo Iturralde.

Los discursos en la sede partidaria fueron breves, y todos coincidieron en la necesidad de coordinar acciones entre las intendencias blancas y con el gobierno nacional. Planean evitar la superposición de gastos y potenciar los recursos.

Si bien no se determinó exactamente cuál será ese ámbito de articulación entre los gobiernos departamentales del Partido Nacional con la Presidencia, se dejó planteada la intención de definirlo.

Con Lacalle Pou la charla fue algo más formal. Les pidió a los intendentes que hagan el mayor esfuerzo para optimizar los recursos que les lleguen desde el Poder Ejecutivo.

“No estamos en momentos fáciles”, les advirtió y los exhortó a la mayor dedicación para “honrar -esa fue la palabra que usó, según varios participantes de la reunión consultados por El País- el cargo público”.

Tras el almuerzo con Lacalle Pou, Guillermo Besozzi, el intendente electo de Soriano, repitió ante los medios de prensa que acordaron trabajar con “mucha coordinación” para optimizar los recursos.

En la tarde se reunieron con las autoridades de la OPP para recibir los lineamientos generales de las propuestas económicas para cada departamento. “Vamos a pedir todo lo que podamos. Hay una fuerte intencionalidad del desarrollo del interior”, dijo Besozzi.

José Carlos Cardoso, “el Cabeza”, como lo conocen entre los blancos, es uno de los dirigentes que resolvió de entrada apoyar la candidatura de Lacalle Pou en 2012. Ayer llegó a la casa de Suárez y Reyes para reunirse con el mandatario minutos después de que terminase el almuerzo con los intendentes blancos.

Cardoso compitió en la elección departamental de Rocha, donde triunfó su correligionario Alejo Umpiérrez. Según supo El País, dialogó con el mandatario sobre su futuro político.

Hoy Lacalle Pou recibirá en la Torre Ejecutiva al intendente electo de Rivera, el colorado Richard Sander. Ya mantuvo un encuentro la semana pasada con la intendenta de Montevideo, Carolina Cosse, triunfadora por el Frente Amplio, y restan las reuniones con los otros dos ganadores de la coalición de izquierda, Andrés Lima (Salto) y Yamandú Orsi (Canelones), que no están coordinadas pero “seguramente” se harán, según fuentes de Presidencia.