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El Kolador

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La columna de Pepepreguntón

Unos cuadernos en los que el chofer de un exfuncionario anotó prolijamente los pasos de su jefe mientras recaudaba coimas y las entregaba al matrimonio Kirch-ner y a sus más estrechos colaboradores, vinieron a transformarse en una suerte de bitácora de lo que fue la corrupción durante la era K.

Los cuadernos desataron el escándalo y empujaron a más de un empresario a convertirse, súbitamente, en colaboradores de la Justicia. Sus abogados les explicaron que cantar como jilgueros les mantendría fuera de la jaula. Y ellos lo entendieron rápidamente.

Los uruguayos observamos el tema con esa mezcla de asombro y superioridad que nos invade cuando las miserias de nuestro hermano mayor quedan al descubierto. Pero nos duró poco. Los cuadernos y varios testimonios daban cuenta que los bolsos llenos de millones de dólares de las coimas habían entrado a Uruguay con asombrosa facilidad. Un puerto en Carmelo, del que casi nadie había escuchado hablar, se volvió famoso. Por allí entraban los dólares de la corrupción K sin que nadie hiciera nada por impedirlo.

Un informe de Telemundo 12 mostró el ya famoso Puerto Camacho y su falta de controles. Y a su propietario diciendo que los bolsos de quienes llegaban en sus embarcaciones desde Argentina no se revisaban porque se confiaba en "la buena fe de las personas".

La Justicia, repentinamente, reabrió causas que habían quedado en el olvido. Y súbitamente se encontraron barcos, mansiones y terrenos vinculados a la corrupción K. Tuvo que investigarse en Argentina para que en Uruguay se encontrara lo que hasta el momento no se había buscado (o no se había querido buscar).

Para colmo, el director de Aduanas, Enrique Canon, llamó a una conferencia de prensa para explicar lo inexplicable. Y fue peor la enmienda que el soneto. El funcionario admitió que las fronteras del país son "permeables" (no nos habíamos dado cuenta) y que "puede haber pasado que hayan entrado con dinero" al país.

Canon fue más lejos. Dijo que "no se puede controlar al 100% lo que entra el país" (grave) pero que si entró dinero de la corrupción K "no lo usaron en el mercado uruguayo" (¿cómo lo sabe?, ¿y las propiedades, terrenos y bienes investigados qué son?). "Hubiera sido un escándalo económico y financiero", sostuvo Canon. Hombre, no lo fue porque nadie controló nada, no porque no haya sucedido. Además dijo que si hubieran entrado US$ 250 millones al país "habrían saltado los controles que el país tiene". Controles que él mismo dijo que tienen toda clase de porosidades y que en Puerto Camacho son débiles cuando no inexistentes.

El director de Aduanas dijo que lo que sabe del te-ma es lo que se conoció a través de la prensa argentina (de nuevo, grave) y que "por el momento no se va a tomar ninguna medida" (faltaba más). Pero aseguró que se hizo "una investigación administrativa de urgencia en Puerto Camacho, que arrojó cero resultados" (maravilloso). Y para dejarnos tranquilos dijo que, como Puerto Camacho, "hay otra docena de puertos deportivos en el país" (mejor no preguntar).

De lo que Canon está seguro es de que "ningún funcionario aduanero miró pa-ra el costado". Nunca.

¿Son o se hacen?

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