ESTRATEGIA PARA LA PRIMAVERA
El presidente Luis Lacalle Pou prevé abrir las fronteras para la llegada de extranjeros al país de manera escalonada, para setiembre cuando llegue la primavera.
El gobierno tiene la mira puesta en setiembre. Ese es el mes elegido para la apertura de las fronteras. La postura de las autoridades es flexible y un cambio de rumbo dependerá de la marcha de la pandemia. Pero los números que se vienen dando en cuanto a los casos diarios, internados y muertes por COVID-19 hacen que en la Torre Ejecutiva haya optimismo.
El presidente Luis Lacalle Pou anunciará el cronograma de apertura en los próximos días en una conferencia de prensa. Allí se aclarará cómo es que se habilitará el ingreso de extranjeros de manera escalonada.
Los primeros que podrán ingresar serán los propietarios de inmuebles que se hayan vacunado, a los que se les permitirá llegar con un núcleo familiar “razonable”, comentó a El País una fuente del Poder Ejecutivo.
Este es un criterio similar al que se utilizó desde que se decretó la emergencia sanitaria el 13 de marzo de 2020, por el cual si un extranjero estaba en territorio nacional podía solicitar la llegada de su familia extranjera a través de un trámite en cancillería. Esa excepción se cataloga “reunificación familiar”.
“Ya he dicho públicamente que estamos pensando para primavera la posibilidad de que propietarios vacunados puedan ingresar. Y estamos pensando ya más sobre el fin de la primavera que la personas extranjeras puedan venir a disfrutar en nuestro país”, dijo el presidente al canal web del diario argentino La Nación en la noche del miércoles.
Las autoridades del gobierno entienden que el proceso de vacunación, la baja de los contagios y también la caída en la mortalidad por coronavirus permitirán a Uruguay ser el primer país de la región en abrir las fronteras a extranjeros.
La medida no solo busca reactivar el sector turístico, que ha sido golpeado por la pandemia, sino también reactivar el mercado interno y seducir a inversores para que instalen en Uruguay nuevos proyectos empresariales.
Este es uno de los objetivos que Lacalle Pou se trazó. Y viene incluso desde antes de asumir el mando, cuando disertó en un foro empresarial en el hotel Enjoy de Punta del Este y se refirió al tema. El planteo fue reiterado el miércoles en la entrevista con el medio argentino.
Con esa idea también viajará el jefe de Estado, sobre el segundo semestre del año, acompañado del canciller, Francisco Bustillo, y el ministro de Turismo, Germán Cardoso, a la Expo Dubái, uno de los encuentros de negocios más importantes del mundo.
En tanto, las autoridades del Ministerio de Turismo tienen en trámite más de 200 pedidos de amarres de cruceros para Montevideo y Punta del Este. La habitual temporada de cruceros se inicia en octubre, y el primero que ha marcado fecha de amarre en el Puerto de Montevideo tiene previsto su arribo previsto para el 27 de octubre.
De todos modos, si bien las autoridades uruguayas estiman que para esa fecha el país tendrá las fronteras parcialmente abiertas a extranjeros, advierten que se pueden presentar dificultades debido a la situación sanitaria que aún atraviesan otros países de la región.
Es que las compañías de cruceros venden sus paquetes turísticos con amarres no solo para Montevideo y Punta del Este, sino también para Brasil y Argentina. Por ese motivo la llegada de esos viajeros está sujeta a la realidad regional.
La presidenta de la Cámara de Turismo del Uruguay, Marina Cantera, dijo a El País que si bien el sector está muy golpeado, la perspectiva de apertura en setiembre “da esperanza” y otorga un tiempo prudencial a los operadores para prepararse.
“Genera una esperanza muy importante. La situación del sector se ha ido complejizando cada vez más y el fondo cada vez es más profundo. Hay que recordar que hay áreas que llevan más de un año y medio sin operaciones. La situación financiera en general es muy delicada y se hace necesario poder abrir para que la gente pueda trabajar”, comentó la representante empresarial.
Baile de máscaras.
Hay dos grandes eventos que son vistos como desafíos por parte de las autoridades sanitarias. Se trata del 24 de agosto, la Noche de la Nostalgia, y la Expo en la Rural del Prado.
El ministro de Salud Pública, Daniel Salinas, dijo el domingo en el programa Santo y Seña de Canal 4 que ya comenzaron a trabajar en un protocolo para la noche del 24. Ese día, junto con la Navidad, es una de las fechas en que más uruguayos salen.
El 2020 el gobierno prohibió todas las fiestas por la Noche de la Nostalgia, dada la pandemia por coronavirus. Sin embargo para este 2021 la situación es diferente, pues ya está habilitada la realización de espectáculos públicos y no rige más el decreto para evitar que se generen aglomeraciones.
“El 24 de agosto ya lo estamos trabajando”, dijo Salinas, remarcando “el desafío” que implica. Al ser consultado por si se habilitarán los bailes, respondió: “Yo lo que pudo decir es que hay que maximizar todas las medidas de control”.
En cuanto a si es posible que se lleven adelante bailes con tapabocas. “Bailes de máscaras hubo alguna vez, ¿no es cierto?”, contestó Salinas.
En lo que respecta a la Expo Prado, los organizadores analizan que solo se permita el ingreso a personas vacunadas.