CONSEJOS DE SALARIOS
El ministro Pablo Mieres iniciará negociación de “acuerdo puente” por un año.
Con la pandemia como telón de fondo, el gobierno propondrá una pauta de ajuste salarial por un “período puente” de un año al Pit-Cnt y a las cámaras empresariales hasta convocar la nueva ronda de negociación. La central obrera advierte que no aceptará la pérdida del salario real, mientras que los empresarios dicen que no acordarán convenios “al barrer”.
Debido a la crisis sanitaria, las diferentes partes estiman que no es posible negociar salarios y condiciones de trabajo de la forma tradicional. Es por eso que el gobierno se dispuso a impulsar una fórmula intermedia que evite una negociación masiva de Consejos de Salarios.
En la semana próxima se piensa convocar al Consejo Superior Tripartito dijo a El País el ministro de Trabajo, Pablo Mieres. “Hay que acordar qué contenidos vamos a establecer como pauta salarial. No lo tenemos definido, estamos trabajando con Economía”, añadió.
Consultado sobre si la pauta salarial sería de carácter general para todos los grupos, Mieres contestó: “No necesariamente, eso es parte de lo que estamos estudiando. Estamos viendo si hacemos una cosa única o si hay niveles, porque la realidad de los diferentes sectores no es la misma”, explicó.
Mieres aseguró que la situación derivada de la emergencia sanitaria “tiene diferencias por sector (...) No todos sufren la misma situación; el turismo está muy afectado”, explicó.
Según el ministro, “entre un planteo de prolongar la vigencia de los Consejos de Salarios por un año (en un país que era distinto) y no hacer nada por un año, hay que establecer la nueva pauta”.
Mieres dijo que se trata de negociar “un puente” o acuerdo nuevo que tendrá una vigencia de un año, hasta la ronda que se iniciará a mitad del año próximo. “Hablamos de un puente porque tenemos una situación de pandemia”, afirmó.
La idea del gobierno es contemplar a todos los grupos de actividad. Solo los convenios colectivos que vencen en julio son 152 subgrupos y a eso se suma la construcción, cuyo acuerdo cayó el 30 de abril.
En 2021 sí se entraría en una nueva ronda salarial, con “un panorama mucho más definido (...) Esto que estamos planteando ahora sería como una ronda de Consejos de Salarios, pero muy acotada y la del año próximo sería en condiciones normales”, dijo Mieres.
Al vencerse los convenios salariales, caen también las cláusulas gatillo acordadas que se activarían en caso de que la inflación llegara al 12%, cosa que no ha sucedido.
Empresarios
Por su parte, el sector empleador analiza el escenario con más dudas que certezas y sin contar con un criterio común. Tan dispar es el contexto que hay lugares en que se podría plantear la rebaja salarial y otros, en que es posible negociar incrementos.
Las fuentes consultadas, que prefieren no ser identificadas hasta que no surja un documento que unifique las posiciones de los empresarios, hablan de que la situación de algunos sectores “es desesperante”, mientras otros viven un momento de “prosperidad”.
En el primer caso se encuentran los sectores relacionados con los servicios, en particular los vinculados al turismo. Por otro lado, se ubican áreas de actividad que se han visto favorecidas por la crisis sanitaria, dos de ellas son la química y el supermercadismo.
En tanto, hay renglones de actividad, como la construcción y la producción agropecuaria, que lograron mantener su movimiento a pesar de la pandemia.
Algunos representantes de los sectores más complicados han manejado la posibilidad de rebajar salarios para mantener puestos de trabajo y evitar el cierre de empresas de pequeño porte. Se espera que en esta semana se conozca una postura oficial del sector empresarial.
Sindicalismo
Consultado sobre la propuesta del gobierno, el presidente del Pit-Cnt, Fernando Pereira, dijo a El País que el planteo realizado por la central era de una prórroga de los convenios por un año “lo que de alguna manera es un puente (...) El tema es acordar el contenido del puente. Por un lado, hay un objetivo central del movimiento sindical que es mantener los puestos de trabajo y por otro es necesario mantener el nivel de ingreso de los hogares. Ojalá logremos un acuerdo entre las tres partes”, añadió.
De acuerdo a Pereira, “si el acuerdo es contenido cero, sin ajustes, es inviable (...) Partimos de la base que tirar abajo salarios va a generar un deterioro mayor de la economía interna”, indicó. Señaló que no obstante, la central es consciente de que “hay ramas de actividad deterioradas” y por eso no tienen “una posición obtusa de no discutir los casos, pero siempre con la perspectiva de mantener el salario real”.
En ese sentido, señaló que si se mantiene todo como esta hoy, es decir sin ajuste, la pérdida del salario real puede llegar a ser de diez puntos en un solo año. “Esto nadie es capaz de admitirlo, por lo menos no sin luchar”, acotó. Aseguró que “no se quiere prejuzgar” y hay que esperar primero cuál es la propuesta de parte del gobierno”, para eventualmente hacer una contrapropuesta.
En conferencia de prensa en el Parlamento, el secretario general del Pit-Cnt Marcelo Abdala opinó que “hay que definir un compromiso muy claro de que el salario real de los trabajadores no se deteriore”.
Nueva movilización ante el Parlamento en crisis sanitaria

Ayer en medio del feriado laborable un grupo de sindicalistas de Ancap y Antel se movilizaron frente al edificio anexo del Palacio Legislativo. Allí estaba reunida la comisión especial del Senado que estudia la ley de urgencia (LUC). Desde el cuarto piso del edificio alguien daba órdenes a los gritos a una mujer que orientaba a los manifestantes sobre cómo pararse para mantener la distancia social.
Una vez resuelta la parada y tomada la fotografía de familia, el grupo se desarmó y se lanzó a mantener animadas charlas con el fondo de tres tamboriles. Horas después el grupo cortó la avenida de las leyes para hacer una “performance” con las imágenes de los detenidos desaparecidos.
Mientras tanto, los máximos líderes de Sutel, Gabriel Molina, y Fancap, Gerardo Rodríguez, se disponían a ingresar en la sala en la que estaban reunidos los senadores. Antes defendieron su visión sobre el futuro de ambas empresas: Molina cree que el ministro de Industria, Omar Paganini, “es uno de los representantes políticos que tienen en el Poder Ejecutivo las grandes multinacionales de las comunicaciones y los dueños de los medios masivos de comunicación”. El sindicalista defendió el Antel Arena y Vera TV.
Rodríguez dijo que el pueblo decidió que “Ancap siga siendo estatal y pública, que el monopolio siga en manos del Estado”. Dijo que la ley “atenta contra los intereses de los trabajadores”. A su vez dijo que el monopolio “es el corazón de Ancap. Y si le sacás el monopolio la estás condenando a la muerte”.