Publicidad

Una copita

Compartir esta noticia

La columna de Pepe preguntón

El senador Luis Lacalle Pou sostuvo que, si llega a presidente, propondrá revisar la normativa vigente para llevar de 0% a 0,3% por litro de alcohol en sangre el nivel permitido para quienes conduzcan vehículos en el país.

“Vamos a impulsar que se vuelva al 0,3% para que se pueda volver a tomar esa copita de vino”, dijo Lacalle Pou durante un discurso en que aludió a los graves perjuicios que la tolerancia cero de alcohol ha causado en el sector vitivinícola nacional.

A Lacalle Pou le cayeron con todo por esta propuesta, tanto desde el gobierno y el Frente Amplio, como desde su propio partido. Le dijeron que no le importaban las vidas que se pierden en el tránsito por culpa del alcohol. Que era un demagogo. Que sólo pensaba en los votos y no en la salud de las personas. Y algunas cosas más.

Miremos primero qué sucede en el primer mundo. El que ha viajado sabe, por ejemplo, que en Europa hay autovías en las que se puede transitar a 130 kilómetros por hora. Quienes lo hacen, ¿están bajo un régimen de tolerancia cero como el que implantó Tabaré Vázquez en Uruguay? Repasemos. Los niveles de alcohol en sangre admitidos en Europa son 0,5 en España e Italia. Claro, son españoles e italianos. ¿Por qué no se fijan en la otra Europa?, se preguntará más de uno. Perfecto. En Alemania es 0,5. También es 0,5 en Bélgica, Francia, Luxemburgo, Dinamarca, Austria, Suiza, Portugal, Croacia, Grecia y Bulgaria. ¿Y el Reino Unido? ¿Por qué no hablan del Reino Unido? Allí es 0,8.

¿Hay más siniestralidad en esos países que en Uruguay? Los indicadores, de nuevo, son testarudos. No la hay. De hecho, el último Informe Preliminar de Siniestralidad Vial 2018 presentado por el gobierno revela que en Uruguay siguen aumentando las muertes en el tránsito, lo que aleja cada vez más al país de los objetivos del decenio que en esta materia fijó la ONU.

El problema, ¿es el alcohol? Veamos. En el 92% de los siniestros las espirometrías arrojaron resultados negativos. Sin embargo, en la casi totalidad de los casos el mal estado de los vehículos o el uso de neumáticos deteriorados, la alta velocidad, el escaso respeto a las señales de tránsito, conducir mirando el celular o la imprudencia de los peatones fueron las causas de los siniestros.

Y del pésimo estado de las rutas nacionales, mejor no hablar. ¿Cuántos siniestros, fatales o no, se evitarían si se hiciera un adecuado mantenimiento de la red vial del país? Pero claro, el gobierno no va a sacar un reporte llamando la atención acerca de la inacción del propio gobierno.

El informe también revela que la mitad de quienes murieron en el tránsito en 2018 manejaban una moto o una bicicleta. La mitad. Un disparate. ¿Y entonces por qué se habla de tolerancia cero al alcohol y no de tolerancia cero a la moto, cuando los números muestran otra cosa?

¿No será hora de criticar menos a quien, en el acierto o en el error, hace una propuesta como en este caso Lacalle Pou, y de poner más énfasis es analizar sin fundamentalismos qué estamos haciendo mal para que, con tolerancia cero de alcohol en el tránsito, cada día mueran más uruguayos?

elpepepregunton@gmail

¿Encontraste un error?

Reportar

Temas relacionados

pepepregunton

Te puede interesar

Publicidad

Publicidad