Sala de gabinete

El canciller Rodolfo Nin Novoa designó con una placa recordatoria la sala de gabinete del Ministerio de Relaciones Exteriores con el nombre de Enrique Iglesias, "uno de los más insignes cancilleres del país", según dijo.

"Es en nuestro corazón donde guardamos los mejores anhelos y los recuerdos de este hombre que, con su trayectoria, tanto le ha servido al país", destacó el ministro en la ceremonia.

En la celebración, en la que estuvieron presentes el expresidente de la República Julio María Sanguinetti y los excancilleres Didier Opertti y Sergio Abreu, Nin Novoa recordó parte de la trayectoria de Iglesias, quien se desempeñó exitosamente en el ámbito académico, político y diplomático, y que, luego de que Uruguay retornara a la democracia, en 1985, fue invitado a ocupar el cargo de canciller.

Desde ese lugar, fue partícipe del acercamiento de Uruguay con la República Popular China, promovió la concertación como política proactiva entre los países de la región, fue una figura clave en el lanzamiento de la Ronda Uruguay del Acuerdo General sobre Aranceles Aduaneros y Comercio (GATT, por sus siglas en inglés), que, varios años más tarde, concluiría con la creación de la Organización Mundial del Comercio (OMC), y ocupó cargos internacionales, como el de la Secretaría General Iberoamericana (Segib).

Iglesias agradeció la distinción que celebra la oportunidad que tuvo como ciudadano, una vez finalizada la dictadura, de contribuir a la reconstrucción de la imagen del país hacia el exterior.

"Esa imagen no podría apoyarse en el poder de una gran economía o de un gran territorio, tenía que hacerlo con el compromiso colectivo de su pueblo por el retorno a la vida democrática", dijo.