Inseguridad

Ayer dos policías se enfrentaron a una banda que estaba explotando un cajero en Millán y Pondal.

El cajero del Scotiabank ubicado en el cruce de las calles Millán y Eduardo Pondal elevó a 70 el número de expendedoras bancarias atacadas desde fines del mes de septiembre del año 2017.

Como en otras ocasiones, los delincuentes arrojaron grampas “miguelito” en la calle y se fugaron cuando la Policía los encontró.

Un testigo se presentó en la seccional octava para avisar que estaban intentando robar el cajero de la esquina, dentro de la sucursal.

Dos efectivos policiales, entre los que se encontraba un oficial, salieron de la seccional y vieron que en la calle había varias grampas “miguelito”.

En el cajero, vieron a un hombre con pasamontañas y el rostro cubierto, con un arma larga que al verlos comenzó a disparar tiros hacia el aire. En ese momento se escuchó la explosión del cajero y los delincuentes se fugaron en un Volkswagen Bora gris.

Los funcionarios policiales solicitaron un móvil de apoyo, que acudió rápidamente. De inmediato se dispuso el cierre departamental.

En el interior del cajero faltaba una de las bandejas de dinero. El servicio no contaba con el sistema de entintado.

Minutos después del ataque el automóvil fue abandonado y prendido fuego en la intersección de las calles Luis Moro y Gustavo Adolfo Becquer.

La información primaria de la Policía “en los alrededores del hecho no se cuenta con sistema de video vigilancia a la vez que las cámaras del interior del cajero se encuentran dañadas”.

Sin embargo, fuentes del Scotiabank informaron a El País que las cámaras del cajero sí funcionaban y que desde el banco se notificó a la Policía de la situación apenas el cajero fue violado. No se registraron personas heridas.

Los delincuentes siguen prófugos.

De acuerdo a las cifras aportadas por el experto en seguridad Edward Holfman de los 70 ataques a cajeros automáticos 28 llegaron a ser consumados y 42 fueron tentativas. En 39 casos golpearon a Banred y 31 Red BROU. El departamento más golpeado es Montevideo con 34 ataques, seguido por Canelones con 21.

El lunes pasado el Consejo de Ministros aprobó el “Instructivo sobre la Implementación del Sistema Antirrobo de Neutralización por Coloración de Tintas para Cajeros Automáticos”. Se aplicará a todas las instituciones de intermediación financiera y le otorga facultades al Banco Central y el Ministerio del Interior para definir las características de los sistemas de entintado que aplicarán.

La norma prevé que el sistema antirrobo deberá instalarse en un “plazo máximo de 90 días” en los cajeros automáticos “más expuestos a conductas criminales”. Se trata de aquellos que funcionan en un régimen de funcionamiento de 24 horas y los cajeros que utilicen el formato de “Isla” y los cajeros portables. Mientras tanto, el resto de los cajeros automáticos tendrán un plazo máximo de 180 días. Las instituciones de intermediación financiera que operan en el país deberán presentar un plan de adecuación ante el Ministerio del Interior, en un plazo máximo de 15 días.

Quedó establecido en la nueva reglamentación que los sistemas de seguridad “deben estar equipados con un dispositivo capaz de inutilizar por entintado de forma automática e inmediata los billetes contenidos en sus gavetas ante acciones criminales en las que se procure la apertura no autorizada del cajero automático”.

Además, se le ordenó ordena al Banco Central del Uruguay, previo intercambio con el Ministerio del Interior, establecer las características de la tinta a utilizar y el porcentaje de manchado de la superficie del billete al activarse el sistema.

Tres delincuentes pretendieron rapiñar una sucursal de Abitab ubicada en la Ruta 33 a dos kilómetros de Toledo, Canelones. Los asaltantes llegaron en un automóvil portando armas largas. El incidente ocurrió a la 10:30 y no hubo que lamentar personas heridas.

Los delincuentes no lograron llevarse nada. Es la segunda vez que el local es asaltado. Otros comercios de la zona han padecido varios asaltos. Un grupo de comerciantes y vecinos viene organizando una movilización por seguridad.