Canelones

"¿Usted se hace responsable de estas declaraciones?", preguntó un oficial de policía al edil colorado Alfredo Silva en una sala de interrogatorios de la Jefatura de Canelones. "Sí, por supuesto", respondió el legislador departamental.

El uniformado tenía una copia de las declaraciones de Silva a El País donde denunciaba que por "presiones políticas" un grupo de vecinos resolvió suspender la "ronda vecinal", el sistema de patrullaje civil que con su iniciativa comenzó a operar en Toledo el 7 de junio.

Los interrogadores policiales le exigieron al declarante los nombres de los vecinos que formaban parte de la "ronda vecinal". El edil Silva se negó a aportarlos.

También le pidieron el nombre de la empresa de seguridad que, tras dejar de operar en el mercado, prestó los chalecos antibalas a los vecinos. Silva tampoco entregó la información.

La Jefatura de Canelones resolvió no informar al respecto y la única versión es la del propio Silva.

El edil fue convocado a la Jefatura a pedido de la Dirección General de Fiscalización de Empresas (Digefe), dpendencia del Ministerio del Interior que regula a las firmas de seguridad.

"Espero que algún fiscal me llame en estos días. Tengo mucho miedo porque le temo más al poder político que a los propios delincuentes", afirmó Silva.