Publicidad

¿Podrá?

Compartir esta noticia

De la cocina sale humo. El olor a quemado ya no puede disimularse. Algunas pocas semanas de análisis parlamentario han dejado al desnudo la forma en que el Frente Amplio condujo a Ancap durante la última década.

Ineptitudes, errores groseros, amiguismos y algunos hechos con apariencia delictiva que deberán ser investigados por la Justicia llevaron a que la principal empresa pública del país atraviese una situación crítica, de endeudamiento millonario en dólares, que todos los uruguayos deberemos seguir pagando de nuestros bolsillos cada vez que carguemos combustible.

Vázquez, Mujica y Sendic miran para otro lado. Hacen campaña, sin sonrojarse, por el neo K Daniel Scioli. Astori y su gente se ocupan de administrar la realidad, que se empecina en mostrar que el "País de Primera" era apenas un eslogan.

Lo de Ancap es un botón de muestra de cómo se malgasta el dinero ajeno. De hasta dónde puede llegar la mala administración de recursos que son de todos cuando no existen los controles necesarios, o cuando esos controles existen pero sus advertencias son desoídas una y otra vez. De que todos están para cortar las cintas, pero ninguno aparece para poner la cara cuando las cosas salen mal. De que hay jerarcas y gerentes en nuestras empresas públicas que están atornillados en sus sillones, ganando salarios de otro país, y que pueden equivocarse una y otra vez con el dinero de los contribuyentes sin que nadie les pida la renuncia.

También de que hay directores de la oposición que no cumplen con la función que se les encomendó. Que ciertamente no es solamente asistir a una sesión de Directorio o calentar una silla, sino controlar.

¿Y qué pasaría si el Parlamento extendiera sus actuaciones a otros organismos? ¿Qué pasaría si se analizara, por ejemplo, el desempeño de Antel? ¿Se animaría el Frente Amplio a habilitar una investigadora para ver cómo fue conducida, en especial durante los cinco años de gestión de la ascendente hoy ministra Cosse?

¿Y qué sucedería si se analizara, con lupa, lo acontecido con la malograda regasificadora? Ahora el gobierno muestra, como un logro, que ha cobrado la penalización establecida en el contrato. ¿Pero esa era la intención del gobierno? ¿No se trataba acaso de hacer una planta regasificadora que se presentaba, en su momento, como esencial para apuntalar el desarrollo del país? ¿Y qué sucedió? ¿Qué pasará con las muchas empresas, en su mayoría nacionales, que han quedado tocadas por el concordato de la brasileña OAS? ¿Y por qué hay una empresa nacional que, nos venimos a enterar ahora, presentó hace dos meses una denuncia penal por estafa contra GNLS ante el Juzgado de Crimen Organizado?

El Frente Amplio, con sus mayorías parlamentarias regimentadas, ha blindado a sus funcionarios, que saben que pueden ser llamados al Parlamento y que, aun cuando no respondan a nada de lo que se les plantea, serán respaldados por la fuerza política. ¿Y la Justicia? ¿Y nuestra Justicia? ¿Podrá actuar como el Uruguay necesita que actúe? ¿Podrá llegar al fondo de estas cuestiones, determinando responsabilidades cuando existan?

¿Podrá? ¿Querrá hacerlo?
El tiempo dirá

- [email protected]

La Columna de Pepe preguntón

¿Encontraste un error?

Reportar

Te puede interesar

Publicidad

Publicidad