Celebran la instalación de una nueva planta de celulosa de UPM.

Salvo Unidad Popular, toda la oposición avala la instalación de una nueva planta de celulosa de la empresa UPM. Desde el punto de vista ambiental se pide "cautela" al gobierno del presidente Tabaré Vázquez.

El senador nacionalista Jorge Larrañaga dijo a El País que "es muy importante" toda inversión que genere desarrollo y trabajo para Uruguay. Sin embargo, pidió tener "especial cuidado desde el punto de vista medioambiental". "Evidentemente el río Negro no es el río Uruguay, ya presenta distintos grados de contaminación y hay que tomar los recaudos del caso", subrayó.

El senador colorado Pedro Bordaberry manifestó su acuerdo con la instalación de la planta de celulosa en el centro del país. En su opinión, el gobierno "deberá medir muy bien" el impacto en el ordenamiento territorial en la zona que se elija, dada la demanda de viviendas y servicios que se genera durante la construcción pero que luego disminuye. "Por suerte ya hay camino andado en materia de seguridad de los contratos, puesto que allá por el 2002 se aprobó el tratado de protección de inversiones con la República de Finlandia hoy todos los partidos lo apoyan, lo que no sucedió en el 2002 donde objetaban que se recurriera a instituciones internacionales de arbitraje", recordó. Sobre los efectos que tendrá la inversión en la economía, el senador opinó que no evitará la recesión en el corto y mediano plazo es decir, este año y el próximo, aunque tendrá un impacto positivo sobre el empleo.

El diputado Eduardo Rubio (Unidad Popular) señaló que "es una mala noticia" la tercera planta de celulosa porque consolida "el modelo de extranjerización de la tierra y proliferación de las zonas francas" y aseguró que desde el punto de vista ambiental "es gravísimo".

INSTALACIÓN AVALADA