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"La naturaleza no nos está dando una tregua"

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Foto: Daniel Rojas

Afectados por el tornado también sufrieron inundación.

A los devastadores efectos del tornado en Dolores, se sumó en la mañana de ayer el desborde del río San Salvador. Las intensas precipitaciones provocaron la acumulación de agua en arroyos y cañadas y determinaron que el curso de agua frente a Dolores saliera de cauce sorprendiendo a quienes viven en la ribera.

"La naturaleza no nos da tregua. Es impresionante como está todo" dijo a El País, Petrona Vera, la primera evacuada de Dolores.

"Anoche no dormimos. A las 3 de la mañana nos sorprendió la crecida y tuvimos que empezar a sacar todas las cosas" indicó la señora que salió junto a sus hijos y nietos, totalizando 12 personas que viven en diferentes construcciones dentro del padrón que está ubicado a escasos 60 metros de un hotel cuatro estrellas. Los evacuados se trasladaron a la casa de un familiar y las pertenencias fueron depositadas en un galpón del molino San Salvador.

Más al sur de la ciudad, el movimiento comenzó a intensificarse poco después de las 9 de la mañana. El río seguía creciendo a cada instante. Al barrio El Chaco, llegaron camiones municipales y personal del ejército para colaborar en la tarea. Se sumaron camiones pequeños y camionetas. Todo era útil con tal de sacar los muebles y electrodomésticos antes de que quedaran sumergidos.

"Esto no se puede creer. Primero fue el viento y ahora es el agua; no nos perdonan una" rezongaba Mario mientras se acomoda la boina luego de cargar un pesado lavarropas.

El Jefe de la Circunscripción del río Uruguay, capitán José Luis Elizondo, confirmó a El País que el número de evacuados y autoevacuados alcanzó el centenar.

"Hemos reforzado las guardias y contamos con apoyo de un grupo de buzos de la Armada especializados en rescate" indicó Elizondo.

El pronóstico no es alentador. Las lluvias se extenderán hasta el martes y todo hace indicar que el fenómeno se extenderá hacia el norte del país. En el centro y sur del país, se cuentan por decenas las rutas y caminos cortados y obras viales dañadas por la fuerza del agua. Uno de los tantos casos se registró en ruta 21 sobre el histórico puente Castells entre Nueva Palmira y Carmelo.

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Foto: Daniel Rojas

TORNADO EN DOLORES

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