El intendente de Montevideo estuvo en A Diario y expresó que los problemas en el transporte y demás áreas deben afrontarse y no "tapar el sol con la mano". "Hay que lograr que la gente deje su auto en la estación de ómnibus y tome el transporte colectivo", afirmó.

Este viernes, el intendente de Montevideo, Daniel Martínez, estuvo en el programa A Diario de El País TV dijo que los problemas del transporte público deberán afrontarse pero primero "hay que apagar algunos incendios en las empresas".

Consultado sobre el aumento del boleto, el intendente dijo que él nunca había dicho que este iba a bajar, sino que debía realizarse una serie de cambios estructurales. "Es demagógico hablar de la baja del boleto hasta no lograr un cambio de estructura en el transporte público", señaló.

Martínez explicó que planea una transformación radical en el sistema de transporte público, con vías rápidas, y estacionamientos. "Hay que lograr que los ciudadanos dejen el auto en la estación de ómnibus y tomen el transporte colectivo", afirmó.

Aclaró, sin embargo, que eso requiere medidas y dinero, "pero no tengo la bola de cristal para saber cuándo se hará".

"Primero tenemos que apagar algunos incendios en las empresas, porque algunas compañías de transporte público están comprometidas desde hace tiempo", afirmó el intendente, que no quiso especificar cuáles eran las empresas que tenían esos problemas.

Martínez desmintió que el problema del aumento del boleto fuera el valor del combustible. Dijo que "no incide en el precio del boleto porque está topeado en 14 pesos hace 8 años, lo que influye en el precio son los salarios". "En poco tiempo se publicará la paramétrica, que indica que el boleto debería estar a $27,72. Magia no puedo hacer", apuntó.

"La licencia a mecánicos está en un convenio que hay que revisar, pero sería un facilismo decir que el problema fue la salida de los mecánicos para la prueba" dijo el jerarca, en referencia a los atrasos en la recolección de residuos que le costaron su puesto al entonces gerente de limpieza, Pablo Escalante.

Martínez aseguró estar convencido de que hay "excelente material humano" y hasta "rebeldía de querer dejar de ser los demonios" por parte de los funcionarios, lo que, según señaló, sirve para promover un cambio en el modelo organizacional.

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