El rector de la Universidad de la República (UdelaR), Roberto Markarian, salió al cruce de su par en la Universidad Católica, Eduardo Casarotti, que esta semana en entrevista con El País advirtió que era "un asunto de extrema justicia" reclamar que los egresados de la institución paguen por su formación una vez que ejerzan su profesión.

Markarian manifestó a El País que "creer que la financiación de la UdelaR debería hacerse por una vía tan marginal es un error". Sostuvo que Casarotti desconoce una serie de "estudios realizados ya por la UdelaR, que demostraron que era utópica la financiación del sistema con fondos que no sean públicos". Y remató: "es una afirmación peregrina que no tiene un elemento técnico ninguno".

Sin embargo, en la campaña hacia el rectorado, Markarian expresó la posibilidad de que el aporte que realizan los egresados a través del Fondo Nacional de Solidaridad debería ser mayor. Markarian, de todas formas, aclaró que "siempre" ha estado "en contra" de que "la UdelaR se financie mayormente por alguien que no sea el Estado".

"Sí, yo pienso que los egresados deben hacer un mayor aporte, pero que los 400 millones de dólares que gastamos para la institución vayan a salir, de forma fundamental, por otro lado que no sea la financiación que hace el Estado, es una utopía; en este país es imposible", precisó el rector de la universidad pública.

Y añadió: "Estoy en contra de que la inversión que se hace en Educación sea un gasto, la inversión es inversión, como la que se hace en carreteras, hay que invertir en tener gente buena, bien formada, y en particular de nivel superior, que es lo que me compete".

El Sindicato Médico del Uruguay (SMU), en tanto, a través de un comunicado advirtió ayer que el plan de Casarotti —que hizo referencia a "médicos que ganan 300.000 pesos por mes" y que podrían "devolver" su formación a la sociedad—, "estigmatiza a un colectivo profesional y comprometido con la realidad social".

Markarian habló ayer con El País luego de reunirse con el ministro de Economía, Danilo Astori, y charlar sobre el presupuesto que se necesitará para este quinquenio. Allí el exvicepresidente se comprometió a llegar al 6% del PBI para la educación, al tiempo que el rector le pidió mejorar los sueldos, becas y se manejó la cifra de 100 millones de dólares para la reestructura del Clínicas. La idea es que el centro sea parte del Sistema Nacional Integrado de Salud (SNIS) y hacer una reforma de la planta física del centro, que podría incluir anular alguno de los pisos.

Sobre el tema de los sueldos, Markarian pidió especialmente por los trabajadores no docentes que tienen "sueldos muy marginales, de poco más de 10.000 pesos". La idea del rector es que se les pague el doble.

Dijo que la UdelaR debe financiarse con las arcas del Estado