Para el senador blanco Luis Lacalle Pou (Todos), el conflicto del gobierno con los gremios de la enseñanza es "una pulseada" que es consecuencia de la ley de Educación del presidente Tabaré Vázquez aprobada en 2008, en la cual se crearon "tensiones y equilibrios por el poder".

De todas formas, anunció que el Partido Nacional está dispuesto a "ofrecer gobernabilidad" a cambio de que se "ejerza la autoridad" frente a la ola de conflictos.

Lacalle Pou inauguró anoche el ciclo Cara a Cara organizado por la Asociación de Dirigentes de Marketing (ADM) en el hotel Sofitel, al que serán invitados dirigentes políticos de la oposición y jerarcas del gobierno.

Lacalle Pou reiteró que el decreto de esencialidad aprobado por Vázquez es "una medida exagerada" que "hace pagar el pato a los alumnos", y lamentó que el presidente no haya querido más la representación de la oposición en la ANEP. Preguntó: "¿La tensión que hoy se vive, sería la misma con un delegado de la oposición?".

La esencialidad, opinó el senador blanco, "es una herramienta a utilizar, pero no en las primeras de cambio", a la vez de insistir en que fue "apresurada la medida".

Lacalle Pou cuestionó el proceder del presidente porque no se aseguró antes el apoyo de su fuerza política. "Debió haberle preguntado a su gente si estaba de acuerdo. Ni su partido lo apoyó". Y agregó que el Consejo Directivo Central (Codicen) de la ANEP "mira para el costado" y los apoyos que tiene "son muy tibios".

Volvió a acentuar las críticas cuando preguntó: "¿Después de esta medida, qué va a pasar mañana?". Y siguió diciendo que "el Frente Amplio con esto se ha quedado sin barra".

Además cuestionó la presentación de los lineamientos del presupuesto para los dos próximos años. "Después de esos dos años vamos a tener la misma conflictividad que ahora. ¿Ustedes lo dudan?".

Lacalle Pou sinceró su pensamiento cuando contó a los asistentes que algunos de sus allegados le dicen "qué suerte que no ganaste. No, yo lamento no haber ganado la elección y ser el presidente. En épocas que no son buenas lo mejor que te puede pasar es ponerle el hombro al país".

Luego, el excandidato presidencial se dedicó a criticar con dureza al gobierno, particularmente por la coyuntura económica y las perspectivas. Recordó que en la campaña electoral el ministro de Economía Danilo Astori había dicho que la situación fiscal era sostenible y que "ninguneaba nuestras advertencias". Laca-lle Pou dijo que el actual déficit fiscal es del 3,5% del PIB y que "cada año el gobierno gasta US$ 1.900 millones de más". "Todos le advertimos sobre las amenazas externas", subrayó.

También criticó al entonces candidato presidencial Vázquez al sostener que "dijo en la campaña que no habría chance de un ajuste fiscal y apenas cuando ganó, el presidente José Mujica le subió las tarifas".

"O son incompetentes, o tienen deshonestidad intelectual. Me inclino por esto último", dijo el líder blanco.

Las promesas de campaña "fueron hechas para aferrarse al poder, por no soltar la teta como dicen en campaña".

Con respecto al futuro, Lacalle Pou dijo que "la austeridad no es una opción hoy, sino una necesidad".

Adelantó que "el Partido Nacional está dispuesto a ofrecer gobernabilidad, pero condicionada a que haya un plan, un rumbo, a que se ejerza la autoridad". "Tabaré Vázquez es mano", dijo. "Debe jugársela por el país o abrazarse al poder".

Dará gobernabilidad si Vázquez ejerce la autoridad, planteó