El trágico accidente en la planta de silos de Fadisol, donde el viernes murieron dos operarios de 18 y 20 años, está siendo investigado por la Justicia de Dolores que inició un presumario penal para determinar las causas que provocaron el siniestro.

La jueza Soledad Nin citó al presidente de Fadisol, Carlos Foderé, y también a trabajadores y voluntarios que participaron de la maniobra de rescate.

"El 6 de febrero es para nuestra familia como el 11 de septiembre para los Estados Unidos", dijo Foderé que se excusó de hablar con los medios y prometió que su empresa emitirá un comunicado para aclarar varios puntos, entre ellos que el silo colapsado aún "está dentro del plazo de garantía" otorgado por la firma Kepler y Weber, responsable del montaje de la planta cerealera.

Mientras tanto, la magistrada actuante quedó a la espera de un conjunto de informes técnicos. "Faltan los peritajes primario y definitivo de Bomberos y en base a eso habrá nuevas citaciones. Pero también en base a lo que surgió en esta audiencia, se citarán a los ingenieros de Ciemsa y Kepler que trabajaron en la construcción de la planta, al tiempo que se requirió a Fadisol la documentación relacionada al contrato firmado entre las empresas", informó Nin a El País.

A priori, el forense habría determinado que Juan Silva (Fadisol, empresa propietaria de los silos) falleció producto de un golpe que le provocó hundimiento de cráneo, en tanto Nahuel Dualde (Control Union, encargada del control de granos) murió por asfixia.

"Se intenta determinar a los responsables y la causa del siniestro porque hubo dos personas fallecidas", aclaró la responsable del Juzgado Penal de Dolores.

Además, la planta quedó interdicta hasta tanto se presente un proyecto de cómo se reparará el otro silo que también presenta daño estructural y tiene serio riesgo de derrumbe.

El operario sobreviviente, que fue internado por precaución en Carmelo, declaró en la sede judicial que al momento que estaban tomando muestras para verificar la calidad del trigo, escucharon dos estruendos y en segundos se les vino encima una montaña de granos. Él pudo escapar porque estaba cerca de la salida, pero sus dos compañeros fueron arrastrados al fondo de la fosa de entre 8 y 10 metros de profundidad.

Contó que un rato antes había varias personas más en el lugar por lo que la tragedia pudo ser aún mayor.

El abogado de Foderé, Julio Basanta, señaló que varios ingenieros declararon en la sede penal, que no existen antecedentes de siniestros de este tipo en Uruguay.

"Fadisol quiere llegar hasta las últimas consecuencias con esto. Quiere saber qué fue lo que pasó y quiere tener respuestas para dárselas a las familias de los fallecidos. En este momento es lo que más nos preocupa", sostuvo el vocero de la empresa.

Informó que el silo estaba cargado con 1.800 toneladas y tenía capacidad para 2.200.

"Ingenieros de trayectoria declararon que no tienen noticias del colapso de un silo de este tipo en Uruguay", señaló.

Basanta considera que en este caso no se aplica la Ley de Responsabilidad Penal Empresarial ya que la norma tiene que ver con el cumplimiento de las medidas de seguridad y "esto es un incidente en la construcción de una obra que colapsó no se sabe porqué".

Aclaró que Fadisol contrató la obra a Ciemsa, representantes de Kepler y Weber de Brasil, en régimen de llave en mano. Los que hicieron la obra civil, todo el montaje, fue Ciemsa".

La empresa envió un avión desde Brasil con un técnico para estudiar lo que sucedió en la planta de Ruta 21 cerca de Nueva Palmira. La próxima instancia judicial fue establecida para el 27 de febrero.

Carlos Machado fue uno de los voluntarios que concurrió a colaborar en la búsqueda. Reclamó que Bomberos de Nueva Palmira debe contar con una máquina extractora de granos "porque todas las plantas de la zona tienen esta fosa y uno nunca puede perder la esperanza de rescatarlos con vida si se actúa con rapidez".

Se abrió un presumario e investigan las causas del colapso