"CUIDADORA" SE QUEDABA CON SU DINERO

Colchones nuevos, materiales de construcción y una casa en proceso de remodelación. Eso fue lo que vieron los investigadores policiales cuando llegaron a una vivienda ubicada en Lomas de Solymar (Canelones) en busca de una mujer, de 47 años y retirada militar, que estaba bajo la lupa por ser sospechosa de robarle más de $ 1.600.000 a un hombre de 88 años.

Esta historia comenzó en octubre pasado, cuando el hombre fue a pagar una cuenta y le dijeron que no tenía saldo en su tarjeta de débito, en la que mes a mes cobraba la jubilación. Luego fue al Banco República y solicitó su estado de cuenta. Allí no solo constató que efectivamente no tenía plata, sino también que habían solicitado a su nombre dos préstamos de alrededor $ 170.000.

El 1° de noviembre de 2020 se presentó a la Policía contando lo que había sucedido. Y también denunció que habían desaparecido US$ 23.000 de su casa. Sin estar aún seguro, se animó a arriesgar que quién podría haberlo engañado y traicionado su confianza fuese la mujer que su hija, que vive en Buenos Aires, había contratado para que lo cuidara, pagara sus cuentas y comprara su medicación.

La adivinanza no era difícil de resolver: esta mujer tenía la clave de su tarjeta de débito.

Con esa información los investigadores policiales de la Zona Operacional III de Montevideo comenzaron a estudiar detalladamente los pasos que ella daba.

Según indicaron fuentes policiales a El País, lo primero que hicieron fue solicitar que se levante secreto bancario para poder acceder a los movimientos de la cuenta del denunciante.

Lo que hicieron fue trazar el recorrido de la tarjeta según las extracciones y los gastos. Así lograron determinar en qué cajeros se realizó cada retiro de dinero y al revisar la cámara de seguridad de cada uno de ellos se constató que, efectivamente, la mujer era la ladrona.

En las filmaciones se pudo observar, incluso, cómo la mujer creó una cuenta online del BROU para luego solicitar los dos préstamos.

El 21 de enero los investigadores, con una orden de detención para la mujer, se presentaron en su casa. Y allí, según narraron fuentes policiales, ella negó tener algo que ver con las extracciones y el uso de la tarjeta de débito para realizar compras.

Los colchones nuevos, los materiales de construcción y la remodelación que estaba haciendo en su casa, fueron una pista más para los investigadores, que luego constataron que la mujer había hecho compras en Sodimac, además de haber adquirido comestibles y otros productos en varios supermercados.

La sospechosa fue conducida a declarar en Fiscalía. Allí se enteró como la Policía había dado con ella. El caso fue investigado por el fiscal de Flagrancia de 8° Turno Leonardo Morales.

La Justicia dispuso que la mujer fuera condenada como autora penalmente responsable de un delito continuado de apropiación indebida y deberá cumplir una pena de ocho meses de prisión a cumplirse bajo el régimen de libertad a prueba.