De los 435.625 jubilados que hay en Uruguay, unos 120.000 cobraban la jubilación mínima: $ 8.011, cifra a la que se llegó en julio de este año con un decreto que otorgó 5% de aumento a las pasividades más bajas. "Me niego a argumentar por qué hay que aumentarlas.

Simplemente hago una pregunta: ¿quién puede vivir con $8.011 por mes? La respuesta se cae por su propio peso," afirma el representante de los jubilados en el directorio del Banco de Previsión Social (BPS), Sixto Amaro.

Para la Asociación de Jubilados y Pensionistas del Uruguay (Onajpu) el último aumento fue "insuficiente" y el promedio en Uruguay de las pasividades es hoy de $12.758. "Lo que nosotros tenemos son derechos adquiridos durante una vida de trabajo. Yo he escuchado sectores decir que los jubilados somos un gasto público sin entender que a nosotros nadie nos regala nada", afirma Amaro.

El representante de los jubilados en el BPS advierte que el sector no solo se ha estancado sino que ha perdido capacidad de compra. "Un jubilado dice deme un quilo de tomate, y no sabe para donde agarrar, porque ha aumentando entre un 40% y 50%, y lo mismo otras frutas y legumbres que hacen a la dieta diaria nuestra".

Con ese ejemplo de economía de hogar básica, Amaro explica que por primera vez en diez años la inflación está por encima del Indice Medio de Salarios (IMS). "Eso no había ocurrido. Si este escenario no se modifica vamos a llegar a fin de año perdiendo poder adquisitivo y tendremos una situación bastante dramática", advirtió.

Amaro, que el viernes transmitió al gobierno la realidad de los adultos mayores, se quejó de que el Indice de Precios al Consumo (IPC) se construya con insumos a los que los jubilados "ni se acercan", como el mercado automotor, y aseguró que lo que más aumentó son los alimentos. "Hay un desequilibrio. Otro tema son los medicamentos. Hay gente que, cuando más los necesita, tienen que interrumpir su tratamientos por los costos".

Los jubilados, según Amaro, comparten una preocupación con los trabajadores: las pautas que dio el gobierno para los Consejos de Salario que fijan el mínimo a 2019 en $15.000. "Nos preocupa porque, entonces, cuánto será la jubilación mínima. Hoy tenemos una diferencia de $3.000" indicó.

Revisar el sistema previsional, incluida la edad para jubilarse, que hoy está en los 60 años con 30 de aportes al Banco de Previsión Social (BPS), figura en el programa de gobierno del Frente Amplio — "La sociedad vive un proceso de envejecimiento que se profundiza. Debe preverse con tiempo sus consecuencias en el mediano y largo plazo, a efectos de analizar e impulsar medidas, comenzando por una alteración muy gradual de las edades de retiro"— y será una de las patas del diálogo social que prometió iniciar en noviembre el presidente Tabaré Vázquez.

¿Pero a qué edad se jubilan hoy los uruguayos? Según el representante de los jubilados en el directorio del Banco de Previsión Social (BSP), Sixto Amaro, el 80% de los habilitados se jubila entre los 64 y 65 años.

Los hombres lo hacen a edades más avanzadas que las mujeres e incluso hay más uruguayos que se retiran del mercado laboral entre los 66 y 68 años que entre los 60 y 62, según datos del listado de altas de jubilaciones de la Dirección de Prestaciones Sociales correspondiente al año 2014.

Los sectores donde se posterga más la edad de retiro son el rural y el servicio doméstico, seguidos por industria y comercio. "Si no cambiamos la tasa de remplazo, que dice que una persona con 60 años de edad y 30 de aportado a penas va a recibir de jubilación el 50% de lo que ganaba como trabajador, no tiene ningún sentido cambiar la edad porque ya la mayoría de la gente no se jubila a los 60 años. Tienen buena salud y si como trabajador gana $20.000 y como jubilado $8.000, deciden seguir trabajando", afirmó Amaro.

La entrega de tablets a jubilados y pensionistas avanza tal como estaba planeado: se llegará a las 30.000 entregas al mes de diciembre. Por ahora se otorgaron en unas 20 ciudades del interior del país. A Montevideo llegarán en 2016, cuando el gobierno triplicará la apuesta ya que planea entregar antes de diciembre de 2016 unas 100.000 tablets más. "El Plan Ibirapitá continuará sin pausa hasta completar las 430.000", comentó a El País el representante de los jubilados en el Banco de Previsión Social (BPS), Sixto Amaro. Cada tablet tiene un costo de US$56, o sea que la inversión total será de US$24 millones.

nDesde hace dos años estar jubilado y trabajar es compatible en sectores como industria, comercio y construcción, pero es "insignificante" el número de personas que iniciaron el trámite y se calcula que hay unos 40.000 jubilados que trabajan en negro, según estimaciones del Ministerio de Trabajo en base a la Encuesta Continua de Hogares.

"Es muy poca gente la que usa la ley. Desde que se aprobó sabían que no iba a ser masiva porque habilita más bien para capacitar a la gente joven o en sectores que no hay mano de obra joven", explicó el representante de los jubilados en el Banco de Previsión Social (BPS), Sixto Amaro.

Entre los jubilados que trabajan, un 47,6% no debería hacerlo porque su pasividad es incompatible con su puesto, lo que genera altos niveles de informalidad (76%), según datos del estudio La continuidad de la actividad en el envejecimiento: desafíos para la cobertura del riesgo de vejez, elaborado por la Asesoría General en Seguridad Social del Banco de Previsión Social (BPS) y publicado en 2013. El porcentaje de adultos mayores que siguen activos difiere según el género (37,2% en hombres y 17,7% en mujeres).

En la reglamentación de la ley se establece que la compatibilidad entre jubilación y actividad "podrá ser autorizada de oficio o a solicitud de un empleador, organización de empleadores o una organización representativa del sector".

El 80% de los uruguayos se jubila hoy entre los 64 y 65 años, según BPS