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Una joven denunció que fue golpeada por seguridad de un boliche

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El local justificó la acción de expulsar cuatro periodistas de 35, 36, 38 y 40 años. Foto: D.Borrelli.

Según el testimonio de la joven, al realizar la denuncia en la Seccional Quinta, fue detenida por la Policía y pasó la noche en una celda.

Una joven denunció a través de una publicación en Facebook que fue agredida por un integrante del personal de seguridad del boliche Jackson Bar, ubicado en Juan D. Jackson y Canelones.

Según el testimonio de la joven, el hecho ocurrió sobre las cinco de la madrugada de hoy, cuando se encontraba bailando con un amigo y uno de los encargados de la seguridad interceptó al hombre para retirarlo del lugar "por la fuerza". La joven dijo que le pidió explicaciones al "patovica" y como respuesta "me hace una llave, me levanta y me golpea contra las paredes".La mujer dijo que otras dos personas fueron retiradas del lugar luego de intervenir para quejarse por el trato hacia ella y su amigo.

La joven, que es estudiante de la Facultad de Derecho de la Universidad de la República, argumenta que un empleado de seguridad masculino no puede ejercer fuerza contra una mujer, ya que para eso se debe contratar a personal femenino en los boliches.

Fuera del local, la joven llamó al 911 y al llegar un patrullero apareció un hombre que comenzó a gritarle. Trasladada a la Seccional 5ª junto a "tres testigos" para realizar la denuncia, pasó a ser detenida por una denuncia de desacato presentada contra ella. Según informó, fue detenida porque la descripción que figuraba en la denuncia era la de "una rubia de pantalón negro".

La mujer fue encerrada y posteriormente trasladada a un centro médico para comprobar las lesiones. Al regresar, según indicó "bajo la promesa de que como estaba calma no me iban a encerrar", fue ingresada nuevamente en la celda.

Sobre las ocho de la mañana la joven se desmayó en la celda y no recibió asistencia ya que "todos entienden que estoy borracha y no me duele nada". Previamente se le había realizado un control de alcoholemia que dio 0,8.

Fue liberada sobre las 9 de la mañana y, según explicó, no recibió asesoramiento para realizar la denuncia contra el local bailable. "La próxima me pueden encontrar tirada en la vereda por un traumatismo en el cráneo, pero no va a pasar nada", se quejó la joven.

El País intentó sin éxito comunicarse con uno de los propietarios de Jackson Bar.

Agresiones de "patovicas"

En 2016 se llevaron a cabo varias investigaciones relacionadas a agresiones por parte de integrantes de la seguridad de distintos boliches. En dos juzgados penales distintos, denunciantes, testigos e indagados declararon que las golpizas de "patovicas" dentro y fuera de los locales bailables son cotidianas.

En Ibiza,según testimonios recogidos en los juzgados, los revoltosos son llevados a un cuarto oscuro previo a una escalera empinada, con escalones flojos y sin pasamanos. En el trayecto, son golpeados hasta por cinco "patovicas" y trasladados mediante llaves conocidas como "golletera" (un brazo que rodea el cuello de la víctima). Por esa escalera fue empujado en marzo del año pasado Enrique Martínez (39), quién falleció al estallar su cráneo tras chocar contra el piso.

En julio pasado, en una fiesta organizada por W Lounge en las canteras del Parque Rodó, un joven fue lanzado por un militar contratado como seguridad del evento. El adolescente cayó desde 20 metros de altura. La jueza penal Fanny Canessa procesó al militar con prisión por lesiones graves y omisión de asistencia. Otros tres guardias también fueron procesados.

En octubre, una avalancha de unas 300 personas que tenían entradas y pulseras con invitaciones a Coyote, trataron de ingresar al local y fueron repelidos por "patovicas". Esa noche, se escucharon al menos cuatro detonaciones realizadas por la seguridad del lugar. Un disparo hirió en el brazo a un joven y otro, realizado por uno de los empleados con el arma de reglamento que utilizaba como funacionario de la Guardia Republicana, pegó en el suelo e hirió de muerte a NIcolás Cuña,que se encontraba fuera del boliche.

El eterno femenino de una imaginativa pintora
El local justificó la acción de expulsar cuatro periodistas de 35, 36, 38 y 40 años. Foto: D.Borrelli.

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