Dos individuos, con rostros cubiertos, tiraron bombas y luego huyeron.

A las 4:08 horas del 31 de diciembre de 2015, tres individuos con los rostros tapados caminaban por la calle Carlos Gardel, en el barrio Sur. Al llegar a la esquina con Río Negro, uno de los sujetos cruzó corriendo la calle y tiró una bomba molotov contra la puerta de entrada de una automotora que vende autos y camionetas de marcas europeas de alta gama.

Segundos más tarde, otro sujeto se acercó a la entrada del local comercial. Luego giró en dirección a la rambla. Caminó unos 10 metros y tiró otra bomba molotov contra uno de los ventanales de la automotora.

Al igual que la bomba anterior, el impacto quedó amortiguado porque el artefacto explotó contra la pared y parte de la ventana.

"Si hubiera golpeado de lleno contra el vidrio lo hubiera destruido y generado un incendio dentro de la automotora", dijo un investigador policial a El País.

A poca distancia de donde impactaron las dos bombas molotov había siete autos deportivos y una camioneta SUV de gran porte. En otro extremo del salón de la automotora se ubicaban otros 15 vehículos.

Mientras los dos individuos lanzaban las bombas incendiarias, un tercero sacaba fotos que, días más tarde, fueron publicadas en páginas web de movimientos anarquistas internacionales.

Los radicales no percibieron que, a poca distancia, se encontraba una pareja que fue testigo del incidente. La pareja caminó una cuadra y avisó a un guardia de seguridad de la automotora, quien llamó a la Policía.

Minutos más tarde, efectivos de la Zona 1 (Centro y barrios aledaños) arribaron al lugar.

El fuego ya se había extinguido. Los policías efectuaron un "operativo pinza" para tratar de ubicar los anarquistas pero éste no dio resultado.

En la mañana del 31 de diciembre pasado, varios policías de la Zona I y de Inteligencia interrogaron a adolescentes que cuidan coches o duermen en las inmediaciones de la automotora atacada.

"Todos ellos señalaron que tenían una buena relación con la automotora y que no habían visto nada raro", afirmó la fuente del caso.

El ataque se enmarca en un llamado mundial anarquista denominado "Diciembre Negro". En el correr del mes pasado, grupos anarquistas protagonizaron por lo menos 50 incidentes en 11 países que incluyó ataques contra sedes policiales, autos incendiados, manifestaciones y pintadas callejeras.

Los episodios violentos ocurrieron en Estados Unidos, Grecia, México, Chile, Reino Unido, Alemania, Perú, Colombia, Brasil, Holanda y Bélgica.

En el 2015, marchas organizadas por grupos anarquistas y radicales realizadas en el Centro de Montevideo alcanzaron los 500 integrantes. En alguna manifestación, individuos con las caras tapadas por pañuelos dañaron cajeros automáticos de un banco, rompieron alguna vidriera y pintaron la "A" de anarquía en muros.

Fuentes del Ministerio del Interior dijeron a El País que el anarquismo en Uruguay tiene un núcleo duro de 50 o 60 activistas y, de ellos, apenas seis o siete están dispuestos a realizar ataques con bombas molotov como el efectuado contra la automotora. Algunos anarquistas integran Plenaria Memoria y Justicia, la organización liderada por Irma Leites. No todos los radicales son violentos sino que consideran que el consumo desenfrenado generado por el capitalismo agobia a la sociedad. Otros creen que en la violencia como agente del cambio.

violenta acción anarquistaEDUARDO BARRENECHE