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La inseguridad en ferias, nuevo tema de campaña

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Intensidad del trabajo en las ferias vecinales hace que haya mucho dinero en los puestos.
Recorrida por feria en la calle Francisco Simon, barrio La Blanqueada, nota por hurto a feriantes, Mvdeo., ND 20150331, foto Ariel Colmegna
Archivo El Pais

La inseguridad en la ciudad de Montevideo se refleja ahora en un nuevo "nicho" para los delincuentes: las ferias barriales, tanto de comestibles como de ropa, están siendo víctimas de rapiñeros fuertemente armados. En pocos días hubo dos casos, uno en una feria de La Blanqueada y otro en La Unión.

Las rapiñas en las ferias es un tema que se instaló esta semana en la campaña para la elección departamental en Montevideo.

El frenteamplista Daniel Martínez (Partido Socialista) estaba ayer de recorrida por municipios de Montevideo y no respondió a las consultas de El País sobre el tema. En el programa de gobierno departamental del Frente Amplio hay algunas propuestas generales para mejorar la seguridad en Montevideo. Por ejemplo se habla de "profundizar" la "calidad" del espacio público, pero sin referencia alguna a las ferias de los barrios.

Sin embargo, la también candidata frenteamplista Lucía Topolansky (MPP) se ha ocupado del problema. Dijo que la modalidad de robar en las ferias "es más vieja que el agujero del mate", según consignó radio Montecarlo. Para Topolansky se deben estudiar "caso a caso" ciertos aspectos relacionados con las ferias vecinales.

La candidata recibió ayer propuestas de la Asociación de Feriantes y dijo que "la más sencilla de resolver" es la que tiene que ver con la instalación de baños químicos. Pero sobre los robos no abundó.

Prevención.

Hacer tareas de inteligencia en las ferias para anticiparse a las acciones de rapiña y venta de droga, y poder contar con un apoyo policial explícito a los inspectores municipales, preparándolos mejor para su tarea, forman el eje del plan que el candidato blanco a la Intendencia de Montevideo por el partido de la Concertación, Álvaro Garcé, está desarrollando para combatir el foco de inseguridad instalado en los espacios públicos de los barrios.

La circulación de dinero se puede restringir tanto en ómnibus como en taxímetros, pero no es sencillo de hacer en las ferias barriales, tanto en las de comestibles como en las que se vende ropa, denominadas ferias especiales. Esa es la primera conclusión a que arribó Garcé ayer, tras mantener una reunión con César Vidal, presidente de la asociación que nuclea a los puesteros de las ferias especiales.

El martes, poco después de mediodía, cuando se levantaba una feria en La Unión, una banda de delincuentes fuertemente armada robó a dos feriantes toda la recaudación, unos $ 120.000. Hay muchos puesteros que están armados y bajo una situación de stress por una rapiña "no sé qué puede pasar", admitió Vidal a El País.

El Mercado Modelo ha sido otro lugar de la ciudad donde ha habido problemas graves de seguridad por las rapiñas.

"Las ferias especiales quieren que se trabaje más en la prevención del delito, en forma conjunta entre el Ministerio del Interior y la Intendencia", explicó Garcé tras la reunión con los feriantes.

Enemigo.

Los feriantes tienen seguridad privada en las ferias, pero al parecer no alcanza. "Si la Intendencia coordinara con el Ministerio del Interior, la prevención es bastante simple, hay cosas para hacer. La Intendencia ha sido casi un enemigo de los feriantes", dijo Vidal.

La Intendencia "tiene personal para la fiscalización de estos espacios, porque si no se transforman en espacios sin ley", sostuvo Garcé, que piensa en una tarea "mucho más proactiva" del gobierno departamental con "intervención fuerte en las ferias tratando de proteger a feriantes y vecinos".

La fiscalización a que refiere Garcé forma parte de un plan para ferias, espacios públicos y el Mercado Modelo, lugares donde circula dinero. "Los funcionarios municipales están en condiciones, sin hablar de formar una policía municipal, de tener presencia más fuerte en las ferias y espacios públicos, permanente, apoyada por la policía. Los inspectores deben poder intervenir ante situaciones que se conocen de tiempo atrás, como la venta de droga, que haya alerta temprana y articulación con la policía para evitar el delito", explicó el candidato de la Concertación.

Una campaña en todos los terrenos.

La campaña por la Intendencia de Montevideo comenzó a acentuarse incluso durante esta Semana Santa, involucrando a todos los partidos políticos. La inseguridad en las ferias es un tema que cobró realce ahora, como parte de la gestión del Frente Amplio en la comuna. Los candidatos opositores Alvaro Garcé, Edgardo Novick y Ricardo Rachetti, más allá de lo programático, han sostenido enfrentamientos con los candidatos oficialistas Lucía Topolansky y Daniel Martínez, por distintos aspectos de la gestión comunal como la limpieza, el transporte, los impuestos y recientemente por el cierre del Palacio Municipal durante la presente semana. La intendenta Ana Olivera se vio lateralmente envuelta en la polémica cuando ordenó a los servicios que emitieran un comunicado explicando los motivos del cierre del edificio central de la Intendencia.

Los policías con que cuenta la Intendencia.

La Intendencia de Montevideo aspira a ampliar el convenio que tiene con el Ministerio del Interior para contar con más policías que respalden la tarea municipal. Desde 2012 comenzaron a ingresar a la Intendencia policías "eventuales" que hacen todo su horario trabajando para distintas dependencias de la administración municipal. Se trata de recientes egresados de la Escuela Nacional de Policía, o efectivos con poca experiencia. También hay efectivos contratados bajo el régimen del Servicio 222.

Los "eventuales" cubren servicios como la vigilancia de la explanada sobre 18 de Julio, el control de la puerta de ingreso por el túnel de San José, la explanada de Soriano, la tesorería, los operativos de Inspección General (tarea en ferias, acompañados por policías), y de Tránsito y Radar. También hacen el patrullaje perimetral del Palacio Municipal cuando les es requerido.

El secretario general de la Intendencia, Ricardo Prato, dijo en julio del año pasado a El País que la administración municipal tiene "entre 300 y 400 policías repartidos con el 222", y que los "eventuales" que trabajan para la comuna son 182. En 2015 se contratará a 50 más, añadió.

La cantidad de efectivos de que dispone la Intendencia a diario es de unos 240.

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No estaba en la agenda, pero dos rapiñas alertan del nuevo nicho delictivoDANIEL ISGLEAS

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