Higienizaron a los pacientes usando “tachitos” de agua mineral de dispensadores.

El Hospital Español estuvo todo el fin de semana sin agua caliente ni calefacción. Los funcionarios usaron calderas para poder bañar a los pacientes. Pero después también se terminó el gas, así que debieron utilizar los dispensadores de agua mineral.

El problema empezó el sábado y se solucionó ayer. En el sindicato del centro de salud sostienen que es la tercera vez en el año que pasa esto y acusan de "incapaces" a los funcionarios que tienen cargos de confianza, advirtiendo que están allí por razones políticas.

"El fin de semana no hubo fuel oil en el Español. No tuvieron agua caliente y no se pudieron bañar. Todo esto por ineptitud de la gestión. Tenemos una administradora que no da pie con bola, pero como es del Movimiento de Participación Popular (MPP) nadie se anima a sacarla. La Administración de Servicios de Salud del Estado (ASSE) sabe de esta situación, pero no hace nada", denunció a El País el líder del sindicato del Español, César Pisciottano.

Durante sábado y domingo los trabajadores se vieron obligados a calentar agua en "las calderas que se usan para hacer un mate", ponerla en recipientes y luego llevarlas a las habitaciones para higienizar a los pacientes. "No se los bañó, se los higienizó en las camas porque si no se nos iban a morir de frío. Esto es inhumano", denunció el líder gremial.

Pero la situación empeoró el lunes, cuando se quedaron sin gas, o sea sin la posibilidad de calentar agua para higienizar a los pacientes, pero también sin poder preparar la comida, que la terminaron haciendo en los microondas.

"En el Hospital Español no hay gas por cañería, hay un tanque de gas grande que es también la tercera vez que se termina y no dan aviso a tiempo a la empresa para que lo traiga a tiempo", contó Pisciottano, quien sostuvo que también van tres veces en este año que se quedan sin agua caliente para bañar a los pacientes.

Al acabarse el gas, los pacientes fueron higienizados con el agua que los trabajadores pudieron sacar de los dispensadores de agua mineral. El centro de salud tampoco contó con calefacción.

Sobre la reacción que generó en los usuarios esta situación, Pisciottano dijo que "la gente de ASSE es muy sumisa, no protesta, porque como en otros lados la situación es peor no dicen nada; pero no es digno para un ser humano estar bañándose con un tachito que salió de un dispensador de agua".

El sindicalista presentó ayer una denuncia sobre estas irregularidades a la dirección del Hospital. El País intentó hablar con las autoridades de ASSE sobre este tema, pero no obtuvo respuesta.

Pisciottano contó, por otra parte, que los trabajadores del Español ya fueron notificados de que algunas de las prestaciones que se brindan en el Centro de Salud Claveaux (ex Filtro) se empezarán a brindar en este hospital.

"La solución que le quieren dar al Filtro, trayéndolo para acá, no tiene sentido. Y lo hacen sin fijarse en lo deteriorado que está el edifico y sin prever cuánto es el personal que se necesita", se quejó el sindicalista.

ASSE ya ha trasladado algunos de los servicios que se brindan en el ex Filtro, como ser el laboratorio que fue llevado a las instalaciones del Instituto Nacional de Ortopedia y Traumatología (INOT).

La Administración ya informó, a través de un comunicado, que "todas las prestaciones que se trasladen lo harán en las cercanías del actual centro, en la misma zona de influencia". El Español está a poco más de diez cuadras.

Las autoridades de ASSE, que advirtieron que el cambio era necesario debido a lo deteriorada que está la planta física del Centro de Salud Claveaux, también informaron que tienen en la mira tres lugares distintos a menos de cinco cuadras, a donde podrían trasladar algunas de las policlínicas que funcionan allí.

Los ginecólogos del Hospital de San José y delegados de la Gremial Médica de ese departamento, comparecieron ayer ante la Comisión de Salud de la Cámara de Senadores. Allí denunciaron que además de las carencias que existen en la maternidad, y que los llevan a amenazar con renunciar si esto no se soluciona para el miércoles de la semana que viene, también faltan pediatras y anestesistas. Además, dijeron que hay atrasos quirúrgicos "de hasta cuatro años". Así lo contó a el país el senador Javier García, quien dijo que la Comisión llamará a la presidenta de ASSE, Susana Muñiz, para pedirle explicaciones sobre este tema.

ASSECARLOS TAPIA