Un trabajo de riesgo demandado para restaurar cúpulas de edificios y limpiar ventanales.
No sufrir vértigo es un requisito indispensable. Capacitarse y superar pruebas físicas y psicológicas constituyen una obligación permanente. Esas son las condiciones que se exigen a las pocas decenas de trabajadores que se cuelgan de edificios de Montevideo para restaurar cúpulas, rehabilitar fachadas y limpiar cristales a cientos de metros de altura.
Sitios como la torre de las comunicaciones de Antel, el World Trade Center, las cúpulas de iglesias o la cruz del Papa en Tres Cruces, son lugares donde suelen trabajar estos "oficiales verticales", como les llaman algunos directores de empresas del sector.
La preparación para emplearse en esas tareas es exhaustiva: demanda unas 200 horas, entre las pruebas teóricas y prácticas.
Las empresas más antiguas del mercado brindan capacitaciones en sus propios locales, que diseñan espacios para someterlos al desafío de trabajar en alturas. Se enseña cómo usar los cinturones de seguridad y las resistencias de las cuerdas.
"Hay que tener mucho respeto por lo que se está haciendo", explicó Joaquín Suárez, director de Spacio Altitud. La aptitud física y psicológica es tan importante que los operarios deben realizar pruebas una vez por año.
Vertical —firma pionera en implementar una técnica alternativa a la de un obrero subido a un andamio o balancín— hizo demostraciones en la Torre de los Homenajes del Estadio Centenario en el 2000. En sus 17 años, ha capacitado a más de 100 personas.
Según los expertos en el rubro, no hay una edad límite para trabajar. "Hay personas de 50 años que lo hacen. Quienes trabajan disfrutan de lo que hacen. Les genera una grata sensación trabajar en la altura", dijo Claudio Cañette, director de esta empresa.
Al rescate.
Al menos dos personas deben trabajar a una distancia de tres metros.
Cañette indicó que la "regla de oro" es que nunca un operario se cuelgue en soledad. "Si hay un solo oficial y se lesiona, nadie lo puede salvar salvo que llames a Bomberos", comentó.
El motivo es garantizar una protección recíproca ante la eventualidad de un problema.
"Te puede bajar la presión o tenés un problema digestivo. La persona que está al lado tuyo te rescata", contó Joaquín Suárez, que supo trabajar en Vertical y se capacitó en Barcelona.
En el año 2000, sufrió el peor episodio desde que se dedica a esta actividad. Le ocurrió en invierno cuando realizaba tareas de mantenimiento en la torre de control del Aeropuerto de Carrasco. "Hasta ese momento, pensé que solo te deshidratabas si te faltaba líquido. Pero el aire también te deshidrata", contó. Tras varios minutos de trabajo, Suárez se desvaneció. Un compañero se le acercó y ayudó a bajarlo.
Como en un ómnibus.
En las primeras experiencias, los operarios la sienten como una tarea "difícil", pero luego que se acostumbran es como "subirse al ómnibus", declaró Suárez.
Leandro Perdomo, director de la firma Leal, ratificó que "al principio cuesta, pero es una técnica a la que le vas agarrando la mano".
Las empresas invierten unos 2.000 dólares por persona para garantizar la seguridad de los técnicos. Una cuerda de suspensión semiestática —que permite que el obrero "no caiga como un yoyó"— está enganchada a una silla. El operario dispone de otra de seguridad y una tercera para bajar las herramientas para trabajar.
El casco también es primordial. El costo para Spacio Altitud es de 84 euros.
Qué se restaura.
En Uruguay, los edificios más altos de la ciudad cuentan con un servicio de limpieza.
El World Trade Center 4, el edificio privado más alto de Montevideo, limpia sus ventanales cada 90 días.
Hospitales e iglesias de la capital suelen pedir estos trabajos para la restauración.
En general, los operarios suben por el ascensor hasta el último piso, enganchan las cuerdas en la sala donde está la máquina que hace funcionar el ascensor.
Hace dos años, cuando hicieron arreglos en la cruz del Papa en Tres Cruces, el procedimiento fue inverso: debieron escalar el lugar para llevar a cabo la tarea.
Arreglo del Palacio Chiarino.
Una de las empresas realizó tareas en el Palacio Chiarino, ubicado frente a Plaza Cagancha. Se le realizó "limpieza de los elementos metálicos descubiertos mediante cepillado con amoladora", según señala el informe de la empresa Vertical. Los operarios también arreglaron fisuras en zonas que estaban dañadas.
Limpieza de un santuario en Minas.
En el santuario de la Virgen del Verdún, en Minas, se hicieron hace poco tiempo tareas de limpieza a base de agua a presión y temperatura controladas, para la eliminación de las acumulaciones de polvo, polución y escurrimientos de agua. Luego, reconstruyeron formas y texturas preexistentes y arreglaron fisuras.
Trabajos a 30 metros de altura en la Cruz del Papa.
En julio de 2015, se llevaron a cabo tareas de mantenimiento en la Cruz del Papa, el monumento ubicado frente al shopping y la terminal de ómnibus de Tres Cruces (derecha). La limpieza y restauración de piezas en cúpulas de edificios céntricos es otro de los trabajos que requiere de empresas especializadas en trabajos en altura.
FOTOGALERÍAJUAN PABLO DE MARCO
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