La polémica sobre la laicidad que despertó la utilización del velo por parte de un grupo de niñas musulmanas recién comienza e incluso el Poder Ejecutivo brindó su postura oficial.

Y, mientras algunos expertos en educación afirman que el velo no está vetado en los salones de clase e incluso nada impide rezar en la hora del recreo, otros plantean que las instituciones estatales deben regirse por el principio de laicidad y recuerdan que están prohibidas las cruces.

El tema fue puesto sobre el tapete por el expresidente Julio María Sanguinetti, quien dijo a El País TV que el concepto de laicidad, ya asumido por la gente como un gesto de tolerancia, hoy se ve cuestionado y este debate, agregó, se profundizará cuando llegue el segundo grupo de refugiados sirios antes del fin de año.

"El Estado no está contra la religión, es neutral", apuntó Sanguinetti, quien dijo que es el propio Estado quien se deberá pronunciar sobre la posibilidad de utilizar velo en los centros de enseñanza.

Para el presidente de la Comisión de Educación y Cultura del Senado, José Carlos Cardoso, por otro lado, no presenta ningún inconveniente que una niña o una joven quiera utilizar velo en clase. "La gente confunde laicidad contra laicismo. Laicismo es militar contra una religión, es tener una actitud contra las religiones. La escuela pública nunca la tuvo", dijo Cardoso, quien se desempeñó como maestro rural. El velo "no tiene por qué representar un problema. Lo que tiene que hacer el cuerpo docente es explicar a todos los niños de qué se trata: parte de la religión, de una forma de vivir. No viola para nada la laicidad", apuntó.

Cardoso recordó un decreto firmado por José Pedro Varela que permitía la enseñanza de religión a contrahorario.

Y en este mismo sentido se pronunció ayer el Poder Ejecutivo, quien publicó en el portal de Presidencia una entrevista a la directora del Consejo de Educación Inicial y Primaria, Irupé Buzzetti, defendiendo el uso de velo en el aula.

"La laicidad es una forma de democracia institucionalizada. No importa la neutralidad sino el respetar al otro. En la escuela tenemos estas libertades", dijo Buzzetti.

Para la directora de Primaria, la cultura está compuesta por tradiciones y creencias y la libertad de cultos "es la verdadera laicidad".

"Yo puedo llevar una camiseta que diga Viva Jesús. El que no la puede llevar es el maestro. Este no puede impartir una educación de corte religioso", explicó por su parte Cardoso.

La vicepresidenta de la Comisión de Educación y Cultura de Diputados, Graciela Bianchi, presentó una postura totalmente contraria a la de Cardoso.

"Este es un Estado laico, con libertad de cultos, sí, pero si uno concurre a una institución estatal tiene que cumplir con las normas del Estado", manifestó. Según Bianchi, si bien es una práctica que no se realiza, las autoridades educativas podrían revisar alumno por alumno para constatar si llevan una cruz. Sin embargo, dijo, no es lo mismo una cruz —que a veces hasta está desprendida de significado religioso— que un velo. "Yo no dejo entrar a nadie vestido de monja", ejemplificó.

"Uruguay vuelve a discutir cosas que resolvió a fines del siglo XIX. Estamos atrasándonos en vez de adelantarnos. No hay dudas. No hay dos bibliotecas", sentenció la diputada en la misma línea que reflexionó Sanguinetti. "Uruguay logró un estatus pacífico de convivencia pese a los aluviones inmigratorios. Hoy no es un problema, mañana puede llegar a serlo", dijo Sanguinetti.

El exmandatario cuestionó las declaraciones del consejero de Primaria, Héctor Florit, quien dijo que el velo hoy es una cuestión más cultural que religiosa. "Si es cultural sería peor, porque no es solo un símbolo de pertenencia. Es un símbolo claro de subordinación de la mujer", dijo.

Un experto en islamismo consultado por El País explicó que tanto el islamismo como el judaísmo y el cristianismo sugieren que la mujer se vista con "recato y modestia" y que solamente en Irán y Arabia Saudita el velo es obligatorio.

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