El gobierno volvió a hacer público ayer su interés por conservar los recursos hídricos del país, en momentos en donde la calidad del agua que llega a los hogares está seriamente cuestionada y se propone la custodia militar de la cuenca del Santa Lucía.

"Durante esta administración vamos a profundizar todos los recaudos que se han tomado y vamos a tener éxito. Vamos a liderar en la región el tema del medio ambiente", aseguró ayer la ministra de Medio Ambiente, Eneida De León.

Durante una jornada dedicada al agua en la Torre Ejecutiva, De León se refirió a los acuerdos que se están llevando adelante para proteger estos recursos. "Eso implica el cuidado de todas las cuencas. Son especialmente importantes las cuencas del río Santa Lucía, que provee de agua potable a más del 60% de la población, y la cuenca de Laguna del Sauce", especificó.

"El acuerdo por el agua implica unificar la sociedad, la academia, todas las instituciones gubernamentales y no gubernamentales a los efectos de poder proteger y preservar y manejar responsablemente un recurso finito como es el agua".

El subsecretario de la cartera, Jorge Rucks, dijo por su parte que este "acuerdo por el agua" implica esfuerzos coordinados para lograr preservar los recursos hídricos del país.

La ministra recordó que se están manteniendo reuniones con el Ministerio de Ganadería y el Ministerio de Industria para lograr integrar las acciones de control y punitivas. "Primero se debe buscar el consentimiento y el consenso de los actores (industrias) y luego, en último caso, llegar a las multas y otras acciones", dijo.

De León explicó que el Poder Ejecutivo está adquiriendo la tecnología necesaria para fiscalizar los vertidos en las cuencas pero que esta no es una tarea fácil debido a la extensión del terreno.

El presidente de la comisión de Defensa de Diputados, Víctor Semproni (FA), volvió a plantear la posibilidad de realizar custodia militar de la cuenca del río Santa Lucía para evitar los vertidos ilegales de la industria.

Rucks recorrerá hoy en helicóptero la región de la cuenca del río Santa Lucía para identificar las zonas problemáticas.

Semproni indicó que "en caso de no haberse cumplido con lo mandatado por los distintos organismos, se pedirá la aplicación de la ley en cuanto a la defensa de los recursos estratégicos", o sea, la intervención de las Fuerzas Armadas en la custodia del cumplimiento de esas normas vigentes.

Los problemas de contaminación por la presencia de cianobacterias en el río Santa Lucía vienen desde hace años.

En 2013, el ministro de Defensa, Eleuterio Fernández Huidobro, alertó que si no se toman medidas contra la aparición de las llamadas cianobacterias puede ocurrir "la peor catástrofe imaginable", y manejó un plan para militarizar esa zona. Su advertencia molestó en ese momento a miembros del gobierno de José Mujica.

Sin embargo, la erosión del terreno, la actividad de los tambos y de las industrias, y en menor medida los vertidos domésticos, siguen causando la concentración de nutrientes que facilitan la aparición de cianobacterias. Frente a este panorama y con la puesta en duda de la existencia de un "plan b", el gobierno puso en práctica once medidas para atender la contaminación de la cuenca del Santa Lucía. Según De León, ocho de estas ya están en marcha.

En este sentido, desde el martes los humedales de Santa Lucía pasaron formalmente a ser parte del Sistema Nacional dé Áreas Protegidas (SNAP).

Uruguay se convirtió en sede del Centro Regional de Gestión de Aguas Subterráneas para América Latina y el Caribe (Unesco), cuyo lanzamiento público se llevó a cabo ayer. Su director, el subsecretario del Ministerio de Vivienda, Jorge Rucks, explicó que se intentará gestionar de forma regional la explotación y conservación de los acuíferos que comparten varios países.

El objetivo de este centro es fortalecer la capacidad de gestión de los acuíferos y hacer frente a las necesidades y requerimientos identificados de forma conjunta con otros países de la región.

El Centro facilitará la investigación y gestión de los recursos hídricos subterráneos para científicos de países en América Latina y el Caribe.

Este nuevo centro se suma a los intentos regionales por conservar el agua. Durante la jornada dedicada en la Torre Ejecutiva, se refirió, por ejemplo, a la gestión integrada de la cuenca transnacional del río Cuareim Quarai, cuya gestión comparte Uruguay con Brasil. Durante las ponencias se presentó también el Informe de Naciones Unidas sobre recursos hídricos.

Tomó como bandera la conservación del recurso hídrico