Reunión de Vázquez y los ministros Murro y Rossi con el Pit-Cnt.

El presidente Tabaré Vázquez le transmitió ayer al sindicato ferroviario y al Pit-Cnt que está dispuesto a estudiar la posibilidad de que los trabajadores de la empresa Servicios Logísticos Ferroviarios (SLF), que transporta carga por tren y es propiedad de AFE, y de la Corporación Nacional para el Desarrollo (CND), retengan la condición de funcionarios públicos, como forma de ayudar a revertir los malos números que está teniendo la operadora.

Vázquez recibió en la residencia de Suárez y Reyes al presidente del Pit-Cnt, Fernando Pereira, al integrante del Secretariado de la central sindical y sindicalista ferroviario, Ricardo Cajigas, al presidente del sindicato de AFE, Carlos Aramendi, y al secretario general Georgy Martínez. Al presidente lo acompañaban los ministros Ernesto Murro (Trabajo) y Víctor Rossi (Transporte), a quienes Vázquez instruyó para que se reúnan con la Unión Ferroviaria en los próximos días para estudiar si es posible que quienes pasen a SLF retengan la condición de funcionarios públicos, como pretende el sindicato.

Cajigas dijo a El País que desde que SLF —empresa propiedad del Estado que funciona bajo el derecho privado— asumió el transporte de carga, "hay un deterioro acelerado" y se han perdido más de 200.000 toneladas (38% en los primeros cuatro meses de 2016 frente al mismo mes de 2015), y dejaron de utilizar los trenes al menos dos clientes privados de gran volumen.

"No hay personal capacitado, bajó la cantidad de vagones, hay problemas de seguridad y hay descarrilamientos importantes como el que se produjo cerca de Montevideo en un puente porque un vagón estaba excedido en varias toneladas", señaló Cajigas.

El sindicato entiende que para saber de trenes en Uruguay hay que ser funcionario de AFE porque no hay una carrera de ingeniería ferroviaria, y la falta de personal capacitado en SLF es lo que explica sus malos resultados.

La Unión Ferroviaria quisiera que SLF desapareciera y AFE retomase el negocio de la carga, pero como a eso no accede el gobierno, se explorará la solución intermedia de que quienes allí se desempeñen puedan seguir siendo funcionarios públicos y no pierdan derechos adquiridos, como pretende el sindicato. "SLF no tiene a nadie que conozca algo del ferrocarril y es incapaz de transportar nada", sostuvo Cajigas.

Según el sindicalista, la reunión fue bastante positiva porque el presidente Vázquez se avino a estudiar la posibilidad de que los que pasen a la operadora privada mantengan la condición de funcionarios públicos, porque coincide con los trabajadores en que el ferrocarril es estratégico.

Por su parte, Aramendi le transmitió al presidente que la asistencia financiera que recibe AFE (que está congelada en pesos desde 2009) se justifica porque el modo ferroviario tiene menor impacto ambiental que los camiones y no deteriora las rutas como hacen estos, lo que genera ahorros al Estado por vía indirecta.

AFE, que no tiene el mismo nivel de ingresos desde que de la carga se hizo responsable la empresa SLF, recibe un subsidio anual de $ 440 millones.

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