Mientras esperan por una respuesta del gobierno, las familias sirias insisten en que "Uruguay es muy inseguro" y que el dinero que obtienen por parte del Estado no les da "para nada".

Las cinco familias sirias que llegaron a Uruguay en octubre mantienen su campamento en Plaza Independencia, exigiendo al gobierno de Tabaré Vázquez ser enviadas al Líbano, desde donde tienen esperanzas de viajar a otro país de Europa (lo ideal para ellos sería llegar a Alemania).

Además insisten en que "es muy inseguro Uruguay" y que el dinero que reciben del Estado no les da "para nada". Las familias sostienen que el gobierno les solucionará su salida del país, aunque en Torre Ejecutiva se dijo a El País que no está previsto el pago de los traslados exigidos.

Mientras tanto, los sirios son ayudados por vecinos de la zona que les acercaron alimentos y ropa. "Acolchados para que pasen la noche", es dijo un solidario vecino según pudo comprobar El País.

Además, hasta el lugar se acercaron los exreclusos de Guantánamo para saludarlos y dialogar brevemente con ellos.

El secretario de Derechos Humanos de la Presidencia, Javier Miranda, dijo ayer a El País que los refugiados tienen las puertas abiertas para irse de Uruguay, pero que el Estado no se va a hacer cargo de pagar los pasajes de las familias.

También sostuvo que una reacción como esta era esperable, porque "siempre los refugiados tienen dificultades para lograr su inserción social".

MANTIENEN CAMPAMENTO EN PLAZA INDEPENDENCIA