El director de Regulación Alimentaria de la Intendencia de Montevideo, Marcelo Amado, precisó a El País que la empresa de catering donde se constató la presencia de salmonella sigue sin actividad, aunque no fue clausurada.

El director de Regulación Alimentaria de la Intendencia de Montevideo, Marcelo Amado, precisó a El País que la empresa de catering donde se constató la presencia de salmonella sigue sin actividad, aunque no fue clausurada.

“No hubo un acto administrativo que dispusiera su clausura, pero se le ordenó a la empresa que suspendiera su actividad” hasta que cumpliera con una serie de exigencias: higienizar y desinfectar las instalaciones donde se procesan los alimentos; disponer la separación de alimentos crudos y cocidos; llevar controles más estrictos de sus proveedores y contar con apoyo técnico, indicó Amado.

“Una vez que la empresa haya corregido esas cosas, tiene que solicitar una inspección, y si la Intendencia comprueba que se han cumplido todos los pasos, se procederá a habilitar su funcionamiento.

Previamente, la directora de la División Salud de la Intendencia, Analice Berón, había informado a El País que la empresa estaba “clausurada”, pero Amado rectificó esa información.

Las inspecciones municipales permitieron identificar el pasado lunes dos lugares de donde procedieron los alimentos que originaron la salmonelosis que afectó a 110 personas la semana pasada.

Además de la citada empresa de catering se tomaron muestras de un establecimiento que cuenta con autorización de INAC para elaborar productos como milanesas de jamón y queso, entre otros. “No es una carnicería en sentido estricto, porque no tiene venta al público”, señaló Amado. Agregó que las muestras tomadas en este establecimiento no arrojaron indicios de salmonella y por ello “no se encuentra suspendida” al día de hoy.

Fuentes del Instituto Nacional de Carnes (INAC) confirmaron a El País que este último establecimiento “opera con normalidad”.

Amado indicó que en el caso de la empresa de catering se detectó que varios alimentos estaban contaminados, entre ellos las milanesas de fiambre y queso, donde se descubrió la salmonella.

Fue más de un centenar de personas las que resultaron intoxicadas, cien de ellos trabajadores de una fábrica, que habían consumido milanesas con puré, y el resto un grupo de amigos que en un asado había comido una tortilla.

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