LIBERTAD DE CULTO
El nacionalista Gerardo Amarilla consideró "una intromisión en asuntos internos del país", además de una "presión" sobre las decisiones que deben tomarse en el país, los dichos de la directora regional de ONU Mujeres, Luiza Carvalho, que sostuvo que las iglesias "refuerzan el patriarcado".
En un planteo formal que Amarilla hizo ante el Ministerio de Relaciones Exteriores, sostuvo que esas expresiones son "violatorias de la libertad de culto consagrada en nuestra Constitución", y que además "discriminan y ofenden a gran parte de la sociedad uruguaya".
En una nota publicada en El País el pasado lunes 27, la directora regional de ONU Mujeres expresó que "la Iglesia no debería ultrapasar sus límites a los lugares públicos".
Para Amarilla, estas afirmaciones van en contra del artículo 5 de la Constitución, que garantiza la libertad de culto así como del artículo 29 sobre la libertad de expresión.
"La historia muestra a las iglesias en general en Uruguay como agentes incondicionales de paz, de solidaridad, de acompañamiento y apoyo al débil y marginado socialmente, contribuyendo al desarrollo de vidas dignas y con propósito", replicó el legislador.
Amarilla reclamó a la Cancillería "un pedido de disculpas y retractación".