Según una encuesta del BID, menos del 50% tiene confianza en la Policía.

Solo el 22,1% de los ciudadanos de Montevideo se sienten seguros cuando caminan solos por la noche, según indica una encuesta del BID que abarca a varias ciudades de América y el Caribe. El número más crítico lo ostenta Bogotá, donde únicamente el 7,7% respondió que camina con confianza por las calles en la noche. Lima se encuentra en el segundo lugar, con el 8,1%.

Por encima de Montevideo, hay 12 ciudades en las que los ciudadanos se sienten más seguros. Manizales, Bucaramanga y Pereira (las tres colombianas) encabezan la lista, con 69.6%, 65% y 60,5%, respectivamente.

A su vez, menos de la mitad de los montevideanos (47,5%) dijo tener confianza en la Policía. En la punta más baja del espectro se encuentra Asunción, con el 6,9%. Y en la más alta Bucaramanga, con el 62,7%.

Ante la consulta de si los encuestados o sus familiares fueron asaltados, agredidos o víctimas de un delito en los últimos 12 meses, se registra un total de respuestas afirmativas del 38, 5% en Montevideo. En el caso de las megaciudades, la capital mexicana tiene el porcentaje más alto de asaltos con violencia (84,4%), seguida por Buenos Aires (60,4%) y San Pablo (58,8%).

La encuesta "Voces Emergentes; Percepciones sobre la calidad de vida urbana en América y el Caribe", separa entre "megaciudades" (México, Buenos Aires, San Pablo, Lima y Bogotá) y "ciudades emergentes y sostenibles", entre las que ubica a Montevideo, Asunción, Mar del Plata, Florianópolis y Managua, junto a otras 20 urbes dispersas por el continente. La encuesta viene realizándose desde 2011 y continúa en evolución durante el presente 2016.

Frente a la consulta de si "el salario o sueldo que percibe y el total del ingreso del hogar le permite cubrir satisfactoriamente sus necesidades familiares", 8.9% de los montevideanos respondió que "alcanza bien" y que "puede ahorrar"; 54.2% dijo que "alcanza justo"; 30.2% que "no alcanza" y que "tiene dificultades", y el 6.2% que "no alcanza" y "tiene grandes dificultades".

Si los datos de la encuesta BID se analizan en forma desagregada por ciudad, se observa que en el caso de Lima se registran las cifras más críticas: más de la mitad de la población entrevistada allí (56,1%) declara tener algún tipo de dificultad para satisfacer las necesidades familiares con los ingresos percibidos. A esta "megaciudad" le sigue San Pablo, donde el 47,9% de las personas encuestadas dijo no poder suplir las necesidades de su hogar. Por el contrario, en el caso de ciudades como Valdivia (Chile) y Vitória (Brasil) se registran los mayores porcentajes de familias que afirman que el ingreso percibido les permite ahorrar (32% y 27,2%, respectivamente).

El porcentaje de montevideanos que reside en una vivienda propia ubicada en terreno de su propiedad es del 50%, muy inferior en comparación con Buenos Aires (77,3%), Asunción (76,3%), Ciudad de México (75,2%), Lima (75,1%) y San Pablo (58,9%); sólo supera a Bogotá (42,3%) entre las principales ciudades relevadas.

El transporte está destacado en la encuesta como tema central del desarrollo de la vida urbana. "Ya sea que se trate de ciudades de gran tamaño poblacional o de ciudades más pequeñas, prácticamente todas las actividades que se realizan están mediadas de una u otra manera por el sistema de movilidad", señala el informe.

Coincidiendo con las encuestas que realiza la propia IMM (en las que se coloca al tránsito y el transporte en la cabeza de los reclamos), el informe del BID indica que a los montevideanos les lleva una hora ir desde sus casas hasta sus lugares de trabajo o estudio, incluso tratándose de una ciudad pequeña. Pero esto no parece alterar demasiado a los usuarios: el 73.2% dijo que el tiempo es el "adecuado".

A su vez, el 60.5% de los consultados señaló que el estado de los ómnibus es correcto y el 65.7% que las frecuencias durante el día son "buenas".

Durante la noche, este guarismo baja drásticamente: casi 70% de los montevideanos entiende que el servicio de ómnibus es malo. A su vez, casi el 40% dijo que los ómnibus de la capital tienen problemas de limpieza. En cuanto a la comodidad, menos de la mitad (el 45.8%) manifestó agrado con los ómnibus que circulan por las calles de Montevideo. Y exactamente la mitad dijo que el precio del boleto no está acorde al servicio prestado.

Los montevideanos son los que encabezan el ranking de los ciudadanos "satisfechos" con los servicios de salud que reciben (76,8%) y con la disponibilidad de médicos (72%). Las cifras superan a Buenos Aires (64%). Entre los menos satisfechos figura San Pablo (33,3%).

Montevideo figura en mitad de tabla de 21 ciudades de las Américas en cuanto al tiempo de demora para trasladarse desde la casa al trabajo, con un promedio de 59,8 minutos. México (98 minutos) y San Pablo (una hora y media) lideran la tabla de demoras.

A Montevideo corresponde la mayor proporción de personas que afirman que han tenido problemas relativos a la calidad de la educación en el último año: 28,7% en Primaria y 30,2% en Secundaria. En la Universidad, el 24,2% señala problemas de infraestructura.

No sorprende que los montevideanos sean críticos con la limpieza, en consonancia con lo que se aprecia a simple vista en las calles. El 66,9% considera que su barrio no está limpio; entre las grandes ciudades, sólo lo superan San Pablo (74%) y Lima (72,4%)

Uno de los aspectos más sensibles medidos en la encuesta se refiere a la falta de recursos para acceder a uno de los bienes más básicos de una persona: la comida. En Montevideo, un 20,2% respondió afirmativamente a esa pregunta; el porcentaje es superior al de Bogotá, Buenos Aires, San Pablo y Asunción. El 31,6% de los montevideanos también admitió que ha tenido dificultades en el último año para pagar las cuentas de agua o luz. El 30,2% también sostiene que tiene dificultades o "grandes dificultades" para cubrir las necesidades con el salario o el ingreso familiar que perciben.

Los montevideanos están entre los más conformes con el servicio de agua potable que reciben (87,3%), por encima de otras grandes ciudades del continente. El principal atributo que resaltan es el "color", con 92% de respuestas "positivas", y la continuidad del servicio (91,4%). Esos aspectos sitúan a la capital uruguaya en el tope del ránking del continente. El "olor" del agua potable registra menos respuestas positivas: 87,5%; en cuanto al sabor, la satisfacción se reduce un poco: 82,8%, y vuelve a caer, al 76,8%, cuando se califica la "presión". Pero todos los valores superan la media de las ciudades relevadas.

La seguridad encabeza la primera de las preocupaciones de las "megaciudades" (México, Buenos Aires, San Pablo, Lima, Bogotá) y también de las llamadas "ciudades emergentes" (Montevideo, Asunción, Florianópolis, La Paz, Mar del Plata, Managua, Valdivia y otras). Entre las últimas, las preocupaciones que le siguen son la "inequidad" económica y la salud. En las megaciudades, la "transparencia" y el transporte. El ruido y la contaminación sonora también son mencionadas como problemas importantes, tanto en las grandes ciudades como en las de menos población.

En Montevideo, el 84,7% dispone de teléfono celular, un elevado porcentaje equiparable al de ciudades como Buenos Aires (83,8%) y Sao Paulo (84,6%). El ránking lo lideran Bogotá (96,8%), Asunción (93,1%) y Florianópolis (93,3%) entre las principales urbes. La capital uruguaya también está en lo alto de la tabla de quienes disponen de telefonía fija (71,1%) y conexión a internet (56,6%). Montevideo lidera la tabla sobre "calidad de las llamadas" realizadas desde un celular (88,9% afirma que es "muy buena" o "buena"). Y es la ciudad que considera más accesible el costo de la telefonía celular.

MONTEVIDEO Y EL VALOR PERDIDOANDRÉS LÓPEZ REILLY