La FOEB quiere que las empresas con las que negocia financien la construcción de un CAIF (centro de atención a la infancia), provean seguros de vida, cobertura fúnebre y una partida fija, pero hasta el momento las empresas no manifestaron su aceptación.

Algunas empresas consideran que estos temas no deberían incluirse en los consejos de salarios y que los sindicatos deberían entender que no es lo mismo la capacidad financiera de una envasadora de agua que trabaja para el mercado interno que la de una multinacional.

Los lineamientos salariales del gobierno apuntan a promover incrementos diferenciales, mantener elevados los niveles de empleo, defender el poder adquisitivo y contemplar la competitividad de los sectores exportadores.

Para la franja de salarios bajos el gobierno sugirió un incremento adicional de 3,5% para los salarios nominales de $ 10.000 a $ 12.000 y de 2,5% para los que van de $ 12.000 a $ 14.000. También se estableció una cláusula "gatillo" que establece que si la inflación superara el 12% anual, al mes siguiente del momento en que ello ocurra se aplicará un ajuste adicional que asegure el mantenimiento del poder adquisitivo. Los sindicatos aceptan esta cláusula.

Con el actual nivel de inflación (9,48% en los últimos doce meses) los lineamientos podrían poner en riesgo el mantenimiento del poder adquisitivo. El alza prevista del dólar puede acelerar más la inflación pero por otro lado si el gobierno redujese el precio de los combustibles eso podría quitarle impulso. Además en los últimos meses del año las presiones inflacionarias suelen ser inferiores. El ministro de Economía, Danilo Astori, aseguró que la inflación no llegará a dos dígitos. En el proyecto de presupuesto el gobierno señaló que espera que la inflación se ubique en torno al 5% hacia 2019.

Los lineamientos abren la posibilidad de negociar cláusulas de productividad.

El caso de la bebida