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Culmina la Escuela de Verano en la Antártida

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Hoy retornan a Uruguay, si no hay impedimentos climáticos, los 20 estudiantes y ocho científicos que han participado de la Escuela de Verano de la Facultad de Ciencias, en la Base Artigas de la Antártida.

Estudios acerca de los invertebrados polares, análisis del agua, vigilancia epidemiológica del virus de influenza aviar y un provechoso intercambio con científicos de la base chilena ocuparon las actividades de los participantes en la expedición que comenzó el pasado 17 de enero.

"El lunes 18, desde temprano, nos dedicamos a instalar el equipamiento de diferentes laboratorios: microscopios y lupas para observar pequeños invertebrados polares y un espectrofotómetro para análisis de agua, y se acondicionó una zona de baja carga microbiana donde se instaló un laboratorio básico de microbiología", explicaron integrantes de la delegación uruguaya.

Una tarde inusualmente soleada y sin viento generó el marco perfecto para la primera salida de reconocimiento del terreno, que insumió 4 horas de caminata.

A partir del martes, las condiciones climáticas se extremaron, con sensaciones térmicas que llegaron a los 16° bajo cero, tormentas de nieve y vientos de hasta 80 kilómetros por hora.

Multinacional.

Entre otra actividades, la Escuela de Investigación Antártica participó el miércoles 20, en la Base Científica del Instituto Antártico Chileno, de un ciclo de seminarios que contó con la asistencia y presentaciones de investigadores de Chile, Corea del Sur, Italia, Rusia y Brasil. En la oportunidad, el decano de Facultad de Ciencias, Juan Cristina, presentó la experiencia educativa uruguaya en el continente helado.

El grupo uruguayo recibió además la visita de científicos rusos interesados en la puesta en marcha de la experiencia educativa uruguaya, y también departió con una delegación de estudiantes chilenos de Secundaria que participan de un programa educativo.

Expuestos a más de 20 horas de luz diaria, los estudiantes forman parte de una investigación acerca del impacto del largo período de luz sobre los ciclos de sueño y vigilia. "Para ello, utilizan equipos que miden la intensidad de luz, la temperatura ambiente y el nivel de actividad", informó Bettina Tassino, una de las docentes.

Regresan estudiantes

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