En lo que va del año la Intendencia de Montevideo autorizó tres trabajos —a financiar con cargo al Rubro Imprevistos— en las obras de saneamiento pluvial que se realizan desde 2014 en la calle Cufré y afectan a vecinos y comerciantes.

Las últimas dos resoluciones fueron aprobadas ayer. En todos los casos, lo curioso es que los gastos imprevistos, para cubrir los cuales en cualquier obra se prevé un monto, esta vez quedan adjudicados para romper lo realizado antes.

Será necesario demoler y retirar 22 metros cúbicos de hormigón de un muro colado, es decir excavado y hormigonado in situ.

El costo de esto asciende a la suma de poco más de 956 mil pesos, incluyendo leyes sociales.

También relacionada con las obras de construcción del tanque de laminación de la calle Cufré hay otra resolución que asigna $ 922.752 para demoler y retirar una parte del hormigón ejecutado por la adjudicataria original de los trabajos, la empresa española Isolux, que no cumplió lo pactado de acuerdo a la anterior administración de Ana Olivera.

El 18 de enero de 2016 había ya sido aprobado el gasto de $ 397.513 para otra demolición de dos muros colados ubicados contra la Avenida Garibaldi, así como para acondicionar las armaduras.

Por resolución del 12 de junio de 2015 se había adjudicado tareas complementarias en la construcción del tanque de Cufré a la empresa Impacto, ante el incumplimiento de Isolux.

El 12 de diciembre de 2014 y el 21 de enero de 2015, la contratista española envió sendas notas a la Intendencia mostrando su disconformidad con la decisión de suspender parcialmente algunas de las obras, y expresando su voluntad de culminarlas en su totalidad.

Sin embargo, la IMM entendió que se configuró causal suficiente para rescindir los contratos, lo cual comunicó a la firma el 3 de marzo de 2015. A esas alturas, según estimaciones de la comuna, al ritmo que iban las obras de Cufré recién quedarían prontas en tres años.

GASTOS IMPREVISTOS