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"No estoy conforme con la formación de los docentes"

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"No hemos tenido todos los recursos que necesitábamos", dijo Garibaldi. Foto: Archivo.
Nota a Luis Garibaldi, maestro y consejero de CFE, Mvdeo., ND 20160405, foto Francisco Flores - Archivo El Pais
Archivo El Pais

Pasó de ser el director de Educación del MEC a ocupar un cargo de consejero de Formación en Educación. Reconoce un déficit en la formación docente, aunque advierte que el mayor problema está en los jóvenes que abandonan la carrera, entre otras cosas porque empiezan a dar clases antes de recibir el título.

Lamenta que no haya voluntad política para crear la Universidad de la Educación, pero al mismo tiempo sostiene que el Consejo igual impulsará una serie de cambios. El más urgente: modificación de los programas.

—El Consejo de Secundaria reconoce que faltan profesores para cubrir todos los cargos. El sindicato sostiene que esto sucede porque se paga poco. ¿Está de acuerdo?

—Este año tuvimos una mejora importante en las inscripciones. Se pasó de 20.000 a 23.000 alumnos, entre magisterio y profesorado. Casi un 15% más. El problema en realidad está en lograr que se mantengan estudiando y que se reciban. Que un sueldo atractivo hace que se inscriban más, no hay dudas; pero también cree-mos que hay que trabajar para que la carrera sea atractiva e impulsar más el programa de becas. Cuando yo quise ser maestro no elegí la carrera por el salario. Hay que trabajar también en la valoración del docente, que ser profesor sea un factor de prestigio. Por eso la necesidad de que se reconozca el nivel universitario.

—La ministra María Julia Muñoz ya descartó cumplir con la creación de la Universidad de la Educación. ¿Cómo afecta esto el trabajo que el Consejo de Formación en Educación tenía planeado?

—Hemos decidido que igual vamos a trabajar para darle nivel universitario a la formación en educación. Esto implica modificar planes de estudio y la infraestructura docente, desarrollar programas de investigación y crear posgrados. La decisión política por la cual por el momento no va a haber Universidad, ya fue tomada. Más allá de que tenemos esperanzas en que se retome este tema y que hemos tenido señales de que esto va a ser así, vamos a seguir avanzando en lo que podamos.

—Pero esto también implica que cuenten con menos presupuesto que el que habían pensado en un principio…

—Obviamente no hemos tenido todos los recursos que necesitábamos, pero creemos que hay cambios que se pueden hacer con este presupuesto. Por ejemplo, no se necesita más dinero para cambiar el plan de estudio. Además, hemos reservado recursos para los programas de investigación. De todos modos, no hay dudas de que el dinero es una limitación, con más dinero se puede planificar mejor e ir más rápido.

—¿Es buena la formación que tienen maestros y profesores?

—Creo que tiene fortalezas y debilidades, pero no estoy conforme con la formación que tenemos hoy. Hay que modificarla. Se tienen que contemplar los cambios que ha vivido la sociedad. El tipo de niño y adolescente que existe. Se requiere una formación más flexible, más acorde con el tipo de docente que queremos. Tenemos que pensar en una carrera que no implique un punto final. Mi primer posgrado lo obtuve 12 años después de recibido, eso no puede ser, se necesita formación inmediata después de egresar, formación complementaria y continua.

—¿No se debería impulsar la promoción del grado docente no solo por antigüedad sino también por formación?

—Primaria ya lo ha hecho.

—Sí, se hizo un llamado pero se presentó muy poca gente…

—Sí, muy poca. El estatuto docente ya establece que esto se haga así. Estamos trabajando en generar más cursos para docentes recibidos.

—En el caso de Secundaria los alumnos de profesorado ya empiezan a dar clases en segundo año. ¿Esto no conspira contra el objetivo de que terminen la carrera?

—Es un círculo, se ponen a trabajar y no terminan. Estamos impulsando más programas para cambiar esto. Hoy existe Uruguay Estudia y un plan de tutorías para los alumnos a los que les quedan cinco materias.

—¿Cuál es la diferencia salarial entre lo que gana un profesor titulado y un alumno que da clases?

—Un no titulado gana 7,5% menos. La idea es aumentar esta brecha, pero al mismo tiempo aumentar los estímulos para que los egresados puedan seguir estudiando.

—¿Cómo repercute en el alumno de Secundaria que su profesor no sea titulado?

—Es obvio que si la clase la da una persona titulada, la formación del joven va a ser mejor. Pero la realidad es que para materias como matemáticas, física, inglés y música hay un déficit importante, y se necesita a estos estudiantes para que den clase. Hemos visto, en varios lugares, que a medida que empieza a haber profesores titulados los que no lo son se sienten amenazados y se ponen a estudiar.

—¿Cuántas becas se otorgan por año?

—Están las becas para los Centros Regionales de Profesores (CERP), que incluyen total o parcialmente alimentación, transporte y residencia. Y las becas de apoyo económico: las que da el Consejo a los estudiantes de educación media, social, maestro técnico y asistente en primera infancia; y la beca Julio Castro, que se da en conjunto con el MEC, para los alumnos de magisterio. El año pasado se dieron 2.435 becas de apoyo económico.

—¿Y cuántas se solicitaron?

—Siempre son más o menos el doble. Este año solicitaron 5.000 y van a estar recibiendo unos 2.400. Para el año que viene vamos a tener un incremento en el presupuesto, se va a pasar de 13 a 20 millones de pesos. Esa planta se va a destinar a pagar más becas.

—¿Cuánto es el monto?

—Es el equivalente a dos BPC (6.680 pesos). Para los alumnos de primer año se pagan ocho cuotas y de segundo en adelante diez.

—¿Y qué se pide a cambio?

—Para otorgar la beca por primera vez se tiene en cuenta un 60% la situación económica y un 40% la escolaridad. Si el alumno quiere renovarla tiene que haber aprobado el 70% de las materias. De primero a segundo año la renueva el 60%, y de segundo a tercero y tercero a cuarto un 80%. Además se les hace firmar un compromiso a los alumnos por lo que, luego de egresados, deben trabajar cuatro años dentro del sistema educativo público.

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"No hemos tenido todos los recursos que necesitábamos", dijo Garibaldi. Foto: Archivo.

LUIS GARIBALDICARLOS TAPIA

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