El grupo chino Helishen le ratificó ayer al intendente de Rocha, Aníbal Pereyra, su intención de explotar la anchoíta en aguas uruguayas y de construir una planta para elaborar harina con ese producto en La Paloma.

El intendente fustigó duramente a las organizaciones ambientalistas que se manifestaron ayer para cuestionar el proyecto que, aseguró, cuenta con el respaldo del alcalde de la ciudad de Zhousan (que estuvo ayer en La Paloma con él) y del gobierno nacional chino.

"Eran 50 personas y acá viven 6.000 personas. Si yo hubiera tenido una actitud similar convocaba a 300 personas. Pero nosotros no estamos para enfrentar vecinos. No está bueno que los vecinos se enfrenten. Vamos a generar una mesa para canalizar todas las inquietudes pero hasta ahora todas las hemos rebatido con fundamentos científicos, serios. La crítica más fuerte es que son chinos y eso es triste por el Uruguay y por la Paloma, donde el 60 o 70% de la población no nació acá", dijo Pereyra a El País. En la reunión de Pereyra ayer con una delegación de Zhousan estuvo el vicepresidente de la Administración Nacional de Puertos, Juan Domínguez y el subsecretario de Ganadería, Agricultura y Pesca, Enzo Benech. Pereyra dijo que ha recibido proyectos menos serios que el que ahora se analiza y que "quisiera yo tener un puerto parecido a ese (el de Zhousan), con la limpieza que opera y con el volumen que opera". El proyecto se regirá por la ley local y los inversores tramitarán los permisos necesarios, dijo.

INTENDENTE CRITICA A ONGS