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El Cerro recupera una reliquia del siglo XVIII

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La Real Casa de la Pólvora está ubicada en Cibils y Burdeos, aproximadamente. Foto: M. Bonjour

PROYECTOS PATRIMONIALES EN EL CERRO

La Casa de la Pólvora se construyó 15 años antes de que se iniciara la obra de la Fortaleza General Artigas.

La Real Casa de la Pólvora está ubicada en Cibils y Burdeos, aproximadamente. Foto: M. Bonjour
La Real Casa de la Pólvora está ubicada en Cibils y Burdeos, aproximadamente. Foto: M. Bonjour

Quince años antes de que se iniciara la construcción de la Fortaleza General Artigas, el Cerro de Montevideo contaba con una fortificación militar de gruesas murallas: la Casa de la Pólvora. Destinada en su originalmente a albergar unos 100.000 kilogramos de este explosivo, la edificación tuvo distintos usos a lo largo de más de 200 años, siendo hoy una propiedad abandonada (en la década de 1990 funcionó allí una biblioteca) que pertenece al Ejército Nacional.

Tras varias tratativas con el Ministerio de Defensa, el Municipio A se encargará de recuperar la reliquia, lo cual costará unos 4 millones de pesos

"Se dice que es una de las tres Casas de la Pólvora que queda en Sudamérica. Hay una en Chile y otra en Perú", señala a El País el alcalde del Municipio A, Gabriel Otero.

"El edificio se mantiene bastante original en lo que refiere a sus paredes. El techo es liviano y de dos aguas, como un dolmenit, y lo habrán puesto hace 30 o 40 años. Se pretende que la recuperación sea lo más fiel a lo original. Y tiene que tener un uso del tipo turístico, porque las instalaciones no bancan una asiduidad. Por ejemplo, se lo puede utilizar para hacer muestras", indicó Otero.

Según el sitio Fortalezas.org, que compila la historia de distintas fortificaciones alrededor del mundo, la Casa de la Pólvora fue recuperada por el coronel retirado Ángel Corrales Elhordoy en 1986, basándose en el plano del edificio realizado por el ingeniero militar Bernardo Lecocq a fines del siglo XVIII.

El edificio está en la manzana delimitada por las calles Bulgaria, Burdeos, Perú y Cibils.

Su planta es rectangular, de 30 x 6 metros, y tiene gruesas paredes con dos aberturas: una puerta al noreste y una ventana al suroeste. Las paredes laterales tienen seis respiraderos, destinados fundamentalmente a la ventilación de la pólvora.

El techo esta realizado a dos aguas originalmente en tejas "musleras", de mayor tamaño que las que se fabrican hoy. "Posiblemente, y como era costumbre en la época, el edificio tuviera una doble cubierta en la techumbre, para asegurar el material explosivo contra filtraciones e incluso ataques con material artillero, como se puede observar hasta hoy en el polvorín de la Fortaleza de Santa Teresa", explica el portal.

El edificio se encuentra rodeado de un alto muro de ladrillo del tipo "colonial" con entrada por una de las paredes de mayor extensión.

Escuela.

La construcción está rodeada por un terreno considerable y junto una escuela conocida como "del polvorín".

"El proyecto que nosotros hicimos fue con los gurises de sexto año de la escuela, del año 2015. Lo iniciamos con ellos y lo trabajamos con las maestras y la directora. Además de la restauración, queremos dejar para el término de esta administración un parque con una plaza", explicó Otero.

El alcalde informó que el acuerdo al que se llegó con el Ministerio de Defensa incluye la habilitación de una vivienda "para que pueda vivir un soldado de tropa y mantener una presencia en el lugar".

Un polvorín que incluía pararrayos.

La Real Casa de la Pólvora está ubicada en Cibils y Burdeos aproximadamente, y es una de las tres que han sobrevivido en Latinoamérica. En dos de sus ángulos (sur y norte), hay estructuras que serían pararrayos destinados a evitar el peligro de una explosión accidental a causa de una tormenta eléctrica. Estas "mejoras" fueron colocadas casi 100 años después.

Otro cartel de Montevideo mirando hacia la bahía.

Junto con la Casa de la Pólvora, un segundo proyecto de recuperación patrimonial que maneja el Municipio A es la puesta en valor de la Posta del Vigía, una construcción de piedra que está casi pegada a la puerta de la Fortaleza. También se colocará, en breve, otro cartel de "Montevideo" mirando hacia la bahía.

"Estamos trabajando en la Posta del Vigía, hicimos una plaza y recuperamos el anfiteatro que está debajo de la Fortaleza. Tiene unos 80 años, pero poca gente lo conoce. Y en breve vamos a poner las letras en la falda", explicó el alcalde.

"La Posta del Vigía es una instalación enorme construida por el Ejército hace muchos años. Lo que queremos es hacer una recuperación del espacio, sanitaria y eléctrica, y luego que la Intendencia la pueda licitar para tener una oferta gastronómica", señaló Otero.

En tanto, el emblemático Parador del Cerro ya no volverá a ser licitado, tras dos intentos fallidos. Se pintará y asegurará la estructura, que quedará "como una ruina o atractivo que cuente lo que pasaba en el Uruguay de hace 40 años", indicó el alcalde del Municipio A.

Durante su época de esplendor, el Parador del Cerro estuvo en manos del empresario Everli Rodríguez. Allí se presentó Joan Manuel Serrat, Vinicius, Astor Piazzolla, y conjuntos como Los Chalchaleros, Los de la Huella e Industria Nacional. Algunos de los shows que trajo a Uruguay fueron polémicos, como el de la Cicciolina, la ex actriz porno y ex diputada italiana.

En 1970, Rodríguez estuvo a punto de irse a vivir a Brasil, cuando los tupamaros le destrozaron el local porque "allí se divertía la oligarquía". Finalmente, a pedido de sus clientes, lo trabajó unos años más.

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