Publicidad

Bottinelli: ataques a Sendic pueden producir un "efecto boomerang"

Compartir esta noticia
Óscar Bottinelli, director de la consultora Factum. Foto: Ariel Colmegna.
Ariel Colmegna

El director de Factum sostuvo que Tabaré Vázquez salió en defensa del vicepresidente porque intuye que se empieza a percibir una campaña contra su número dos.

El analista político Óscar Bottinelli se refirió hoy a los dichos del presidente Tabaré Vázquez en defensa de su vice, Raúl Sendic, y sugirió que el mandatario está percibiendo un "efecto boomerang".

En declaraciones al programa Inicio de jornada de Radio Carve, el director de Factum sostuvo que lo que "se observa es que los ataques a Sendic, independientemente de que se considere que estén justificados o no por las cosas de las que se lo acusa y analizado desde el punto de vista del juego político, han tenido una cadencia en los últimos tiempos que cambia un poco, para algún sector de gente, la percepción de lo que está ocurriendo. De ser denuncias contra una persona, ya pasa a ser una campaña de demolición contra alguien que está fuertemente golpeado".

Bottinelli señaló que, si bien la encuesta de aprobación a los representantes del gobierno que se está realizando aún no está finalizada, "tenemos la percepción de que, siendo muy mala la imagen de Sendic, hay un leve mejoramiento, o si se quiere, está un poco menos mala. Eso probablemente sea porque pasa a ser considerado como que está victimizado o que se lo está pateando en el suelo".

"En las reacciones políticas que se producen cuando se ataca duramente a alguien, hay un momento que en términos vulgares se conoce como 'pasarse de rosca' y (en el que) contra lo que pretenden los que atacan, empieza a producirse un 'efecto boomerang' en el sentido contrario", destacó.

"No lo podemos demostrar todavía pero hay indicios de que empieza a producirse un 'efecto boomerang' en este sentido", señaló.

La percepción de Vázquez.

Bottinelli afirmó que "da la impresión de que Vázquez está percibiendo" el corrimiento las opiniones respecto a su vicepresidente. Y opinó que el presidente "se maneja más intuitivamente, algo él está olfateando".

Esta situación "le sirve" a Vázquez porque "siempre ha buscado un vicepresidente que le sea muy leal, como el caso de Nin Novoa (2005-2010), o que no le signifique una competencia o riesgo político".

Según el analista político, "el hecho de que quede como sucesión presidencial Lucía Topolansky no es lo más agradable para el presidente Vázquez. Además, en ese caso quedaría (José) Mujica como presidente de la Cámara de Senadores y la Asamblea General, lo cual no es el esquema que más le puede gustar a Vázquez. Por eso ha jugado en tratar de separarse de Sendic pero no sumarse en contra".

"Si uno observa, muy pocas veces Vázquez salió a hablar del tema. Generalmente aparecen voceros, muchas veces no identificados: 'el presidente le expresó el respaldo', o Sendic diciendo 'yo le ofrecí, yo le dije, él me respaldó'", señaló.

Según Bottinelli, las declaraciones de Vázquez ayer representan "la primera vez que él se larga tan explícito en el contenido de lo que dijo y hablando del tema claramente. Este es un cambio notorio del posicionamiento de Vázquez respecto al 'Tema Sendic'".

La "embestida baguala".

Bottinelli sostuvo que "hay una campaña muy notoria, que empezó en Brasil el año pasado, contra gobernantes de izquierda. Que existen campañas contra gobernantes de izquierda es un dato de la realidad, (así como) existen campañas contra otros gobernantes y en este caso la intensidad de los ataques se ha dado muy pocas veces".

El caso más parecido en Uruguay fue "lo que Luis Alberto Lacalle calificó de 'embestida baguala'. Creo que probablemente (el caso de Sendic) termine siendo mayor o más concentrado en menor lapso. La de Lacalle lo que tuvo además es que fue duradera. Empezó a fines de 1995 o principios de 1996 y duró hasta que terminan las elecciones internas (de 2004)".

Bottinelli dijo a Inicio de jornada que "más allá de otros elementos en juego, que hubo muchos, notoriamente hay una curva descendente de Lacalle, que en un momento toca piso con una intención de voto espeluznantemente baja y luego tiene una curva ascendente que lo lleva a ganar con relativa holgura la candidatura presidencial del Partido Nacional (en 2009)".

Más adelante, el director de Factum explicó que la comparación con la "embestida baguala" contra Lacalle fue "en relación a lo que implica una campaña y los resultados que provoca. Lo que hubo fueron ataques ciertos que terminaron en procesamientos y luego algunas cosas que no terminaron en procesamientos pero (en las que) fue muy evidente un juego poco ético de algún ministro, pero del presidente (Lacalle) no hubo ninguna documentación ni prueba. Esto se rescata mucho después, hay todo un tiempo en el que la sucesión de ataques no da tiempo a que aflore cómo terminaron siendo los hechos".

Pasados de rosca.

El director de Factum dijo que "en un combate de boxeo, por más rabia que le tenga un boxeador al otro, sabe que tiene que saber hasta dónde golpear, dónde, cómo, para no destruirlo, y tener mucho cuidado de no pasarse de rosca".

En el caso de las declaraciones de la oposición sobre Raúl Sendic "hay que tener cuidado de no pasarse de rosca, sobre todo cuando ya hay un montón de ataques que no tienen que ver específicamente con los resultados de la gestión de Ancap".

Bottinelli explicó que "si analizamos los ataques, están teniendo mucha más importancia cosas menores respecto al punto de vista sobre el impacto del país. Por ejemplo: Pedro Bordaberry hizo cuatro denuncias en la Comisión Investigadora (de Ancap) referidas a sobrecostos de cuatro obras. Eso explica muy buena parte del déficit. Sin embargo, cuando se ataca, lo que menos se está mencionando es eso. Estamos hablando de cientos de millones de dólares".

De todos modos, reconoció que "es mucho más fácil para alguna gente comprender si se gastó miles de pesos en Divino que si se fueron de más 300 o 400 millones de dólares en una obra".

El analista político pidió "no confundir tres temas: la gestión, lo ético y lo penal".

Según Bottinelli, "una persona puede hacerle perder al país cientos de millones de dólares. Eso no es ningún delito, es un error muy grande de gestión, que seguramente es lo que más impacta sobre el país. Otra cosa es lo ético. Cada partido corresponde a valores diferentes y la ética es muy distinta. Las transgresiones a la ética no necesariamente son delitos".

"El tema de que se juegue todo en la Justicia penal" es que la investigación "va a ir directamente a la existencia de delitos y si son o no son graves", consideró.

El eterno femenino de una imaginativa pintora
Óscar Bottinelli, director de la consultora Factum. Foto: Ariel Colmegna.

TARJETAS CORPORATIVAS

¿Encontraste un error?

Reportar

Te puede interesar

Publicidad

Publicidad