El diputado colorado Adrián Peña, observador de la elección que se llevará a cabo hoy en Venezuela, calificó a este país como "caótico" y como un sitio en el que "las cosas tienen poco sentido con la realidad".

"Con 10 bolívares, que no llega a ser un peso uruguayo, uno puede llenar el tanque del auto tres veces. Un dólar sale 800 bolívares en el mercado negro, que es en el único lugar donde se puede comprar. En los supermercados no hay arroz, ni café. Los alimentos los dan determinados días a las familias que no pueden llevarse más de dos paquetes de cada cosa. No hay una realidad sobre lo que vale el dinero, sobre lo que se gana, es una economía totalmente regulada", explicó el legislador.

Como un dólar son 800 bolívares, explicó Peña, él y otros legisladores uruguayos se han visto obligados a andar con pilas y pilas de billetes en las calles. "Andamos con mochilas o con bolsas llenas de dinero por ejemplo cuando salimos a almorzar; una comida sale en el entorno de los 5.000 bolívares", contó.

Tanto él como la senadora nacionalista Verónica Alonso, denunciaron que en los últimos días previos a la elección camiones del Estado han salido a repartir alimentos sobre todo en las zonas más pobres, y que en los supermercados se pudo ver, a partir de ayer, más alimentos que lo habitual. Pero esto trajo sus consecuencias. "Hay colas para recibir comida, he llegado a ver filas de hasta dos cuadras", dijo impresionada Alonso.

Los observadores uruguayos hoy intentarán hacer lo mejor posible su trabajo sin tener acceso a, por ejemplo, las mesas de votación. No pueden entrar. La oposición lo que más les pidió controlar es que no haya gente armada en las calles. Durante la elección, si se cumple la ley, los militares deberán permanecer dentro de los cuarteles, salvo aquellos uniformados que están cuidando las urnas. Peña dijo que encuestas extraoficiales hablan de que entre los jóvenes el chavismo no llega ni al 20% de los votos y que la oposición ganará la elección con comodidad.

Elección en Venezuela