El pasado martes la periodista de Caras y Caretas Isabel Prieto Fernández sufrió un atentado mientras viajaba en su automóvil desde El Pinar hasta Montevideo. La trabajadora logró escapar con vida, aunque con una herida leve en la cabeza.

El lunes de esta semana, Prieto Fernández había denunciado en la web de Caras y Caretas el maltrato del que fue objeto por parte de un oficial cuando intentó obtener información en la Seccional 19ª sobre el asesinato de una mujer en Verdisol.

Según informó la revista, la periodista regresaba a su casa por 20 de Febrero cuando dos hombres en moto alcanzaron el auto y dispararon con una 9 milímetros a la altura de la cabeza. Prieto Fernández logró acelerar, pero al agacharse una bala le rozó la cabeza.

La periodista siguió a toda velocidad por Centenario y luego por Varela. Frente a Coraceros vio una camioneta de la Policía y frenó. Allí pudo realizar la denuncia.

Fue trasladada al Sanatorio Americano, aunque afortunadamente ningún proyectil le alcanzó el cuerpo. Sin embargo, las huellas del furioso ataque quedaron sobre el vehículo.

El ministro del Interior Eduardo Bonomi recibirá este jueves a una delegación de la Asociación de la Prensa del Uruguay (APU), luego de que el sindicato denunciara el intento de homicidio y le solicitara una entrevista con carácter urgente.

La periodista afirmó no tener elementos para vincular el ataque sufrido con el episodio de maltrato que había vivido en la comisaría el día anterior.

Sin embargo, el hecho generó preocupación y repudio en asociaciones que monitorean posibles amenazas a la libertad de expresión.

El Centro de Archivos y Acceso a la Información Pública (CAinfo) emitió ayer un comunicado en el que "repudia este atentado contra la periodista y exhorta a las autoridades a realizar una rápida investigación a fin de identificar y castigar a los responsables".

"En caso de confirmarse su relación con el ejercicio de la profesión se trata de un grave caso de amenaza a la libertad de expresión", señaló la organización.

El caso, dijo, "será incluido en el próximo informe de monitoreo de amenazas a la libertad de expresión de periodistas, que CAinfo elabora en colaboración con la Asociación de la Prensa Uruguaya".

Por el momento, se dispuso la presencia de guardia policial en el domicilio de la periodista.

DE CARAS Y CARETAS