LICITACIÓN NO TUVO INTERESADOS

A raíz del resultado, el ente petrolero busca otras opciones para poder concretar la estrategia.

Hace más de un año atrás, en diciembre de 2016, Ancap anunció que dejaría de fabricar bebidas alcohólicas y que integraría la operativa industrial de sus subsidiarias CABA (dedicada a la producción de bebidas, alcoholes medicinales y otros productos) y Alcoholes del Uruguay (ALUR).

En aquel momento, la compañía señaló en un comunicado que divulgó que se desprendería u201cde los productos de consumo masivo (bebidas alcohólicas, cuidado personal, artículos de ferretería), que seguramente pueden agregar valor a las carteras de otras empresas dedicadas a esos segmentosu201d. Para esto, colgó un cartel de u201cse vendeu201d a CABA. Era el adiós para el whisky Mac Pay o el ron Espinillar.

Pero, 13 meses más tarde, este proceso no arrojó ningún interesado en adquirir a la vinculada de la petrolera estatal.

u201cAncap informa que no recibió ofertas para la compra de su subsidiaria CABA en un proceso licitatorio que culminó hoyu201d, indicó en un comunicado la empresa timoneada desde marzo de 2016 por Marta Jara.

El objetivo había sido vender a CABA como una u201cempresa en marchau201d, pero u201ca partir del resultado obtenido se continuará con otras opciones que permitan concretar la estrategia trazada por el Grupo Ancap de concentrar sus actividades en el sector industrialu201d, se agregó. No se precisó, no obstante, cuáles serían esas u201c otras opcionesu201d.

En el texto Ancap también da cuenta de algunos de los atractivos que, a su juicio, posee la firma que está tratando de vender: u201cCABA cuenta con activos, entre ellos el derecho de uso de marcas propiedad de Ancap y de uso de la infraestructura logística en Capurro, que pueden agregar valor a otras empresas dedicadas a estos segmentosu201d.

Cuando en agosto pasado las autoridades de Ancap convocaron a una conferencia de prensa para informar acerca del balance del primer semestre de 2017 (tuvo una ganancia de US$ 77 millones en ese periodo), se conoció que durante esos seis meses las empresas vinculadas al grupo habían tenido una ganancia de US$ 4 millones.

Sin embargo, CABA fue una de las que acumuló pérdidas a lo largo de la primera mitad del año que acaba de terminar, que ascendieron a $ 9,1 millones (en pesos corrientes).