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"Ancap está quebrada, si no fuera del Estado cerraba"

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"Por acción o por omisión, todos en el gobierno son responsables", afirmó.
ALVARO DELGADO , ASUNCION DE NUEVOS DIPUTADOS, CAMARA DE DIPUTADOS, FOTO BORRELLI, ND 20100215 - DARWIN BORRELLI / DIARIO EL PAIS
DARWIN BORRELLI / DIARIO EL PAIS

El senador del movimiento Todos, del Partido Nacional, fue el denunciante que llevó a la creación de la comisión investigadora sobre Ancap, que el viernes terminó su trabajo y presentará sus informes en febrero próximo con la apertura de un nuevo período legislativo.

Delgado adelantó en entrevista con El País que el caso Ancap será enviado a la Justicia porque hay sospechas de que hubo ilícitos durante las gestiones en los gobiernos del Frente Amplio. “Lo peor es que esto termine en nada”, dijo el senador.

En agosto comenzó a funcionar la comisión investigadora del Senado sobre Ancap, que el viernes mantuvo su última sesión. Para la oposición no fue fácil lograr que el Frente Amplio aceptara la creación de la investigadora. De hecho la coalición oficialista nunca había habilitado que se indagara sobre las gestiones de las empresas del Estado desde 2005, cuando llegó al gobierno por primera vez. Ni siquiera en el caso Pluna que terminó en la Justicia penal. La de Ancap fue la primera, y a las doce denuncias que presentó el Partido Nacional a través del senador Álvaro Delgado, se sumó un duro enfrentamiento en el gobierno y el Frente Amplio entre dos bloques: uno liderado por el expresidente y actual senador José Mujica —que defiende al vicepresidente y extitular de Ancap, Raúl Sendic—, y el otro por el exvicepresidente y actual ministro de Economía, Danilo Astori. En medio de este panorama, el presidente Tabaré Vázquez salió a confirmar que el gobierno capitalizará Ancap en unos US$ 750 millones, y que evalúa la remoción de directores y gerentes, dos anuncios que abonaron la polémica entre los bloques mujiquistas y astoristas. Para los partidos de la oposición, la proyectada capitalización viene a confirmar que Ancap está técnicamente quebrada, y coinciden en que el primero que debe dejar su cargo es el actual presidente de la empresa pública, José Coya, que integra el sector de Sendic. Pero en los planes de Coya no está irse.

—Luego de cuatro meses de trabajo de la comisión investigadora, ¿qué balance hace?

—Esta comisión se creó cuando varios desconfiaban de la seriedad de las denuncias. La investigadora fue una oportunidad de utilizar un instrumento de contralor parlamentario que había estado vedado en estos últimos diez años por la mayoría parlamentaria del Frente Amplio. El tiempo fue confirmando nuestras denuncias. Lo importante de esto es que fue un ejercicio de transparencia. Ahora todos se echan las culpas, José Mujica a Danilo Astori, Astori a Raúl Sendic, pero lo que está claro es que sin comisión investigadora nada de esto se hubiera conocido. El Frente Amplio siempre barrió para abajo de la alfombra. Esto sirvió para que la gente se enterara, porque el ciudadano es el principal accionista de Ancap y el primer perjudicado con estas gestiones. Una de las cosas más importantes de la comisión es que habíamos logrado un equipo con José Carlos Cardoso y en medio del trabajo él sufrió un accidente.

—El senador Luis Lacalle Pou afirmó la semana pasada que a su entender hubo delito en la gestión de Ancap. ¿Cuáles son las conclusiones que usted extrae de estos meses de trabajo en la comisión?

—Lo primero para decir es que todos, por acción o por omisión, son culpables. Hubo varios gerentes de primera línea que se negaron a venir. Los que no vinieron aumentan las dudas. Acá hubo errores de gestión, se tomaron decisiones inconvenientes para la empresa y para el país, hay irregularidades que derivan en responsabilidades políticas, y hay otras situaciones donde presumimos que ha habido ilícitos. Y eso va a ir a la Justicia para que determine responsabilidades. Lo peor que puede pasar es que esto termine en nada. Hay que hacerse cargo y no tratar de zafar de las responsabilidades. Hay responsabilidades políticas y administrativas.

—¿Qué es lo más grave que encontró de todas las denuncias que presentó?

—Hay mucha cosa diferente, como presunción de ilícitos, cosas irregulares, de gestión. Tenemos que ser claros al determinar responsabilidades. Lo peor de esto fue la actitud, la soberbia, la falta de autocrítica, la actitud cultural de decir "acá no pasa nada". Como hizo José Coya, como hizo Raúl Sendic, que ni siquiera reconocen errores. Esa actitud es la que hay que cambiar. Lo que nadie desconoce es que Ancap está técnicamente quebrada. Si no fuera estatal habría cerrado ya. Más allá de la discusión sobre gastos reconocidos o no, del déficit a causa del dólar, del subsidio del boleto, de los pisteros, de las transferencias, en fin, más allá de eso, Ancap siguió funcionando como si nada ocurriera. Es como si el Titanic hubiera advertido el iceberg y hubiera seguido avanzando y acelerando. Ante esto lo primero que debió hacer el directorio es cambiar el ritmo, reprogramar inversiones, bajar costos, y no llegar al colapso. Nunca hubo autocrítica. En 2014 aumentaron los honorarios y contrataciones en un 33% respecto al 2013. Fueron US$ 85 millones. Aumentaron la publicidad en 2014.

—Desde el Frente Amplio se dice que la comisión investigadora tuvo como objetivo dañar la imagen de Sendic, que puede llegar a ser uno de los candidatos presidenciables del oficialismo en 2019. ¿Se buscó bloquear electoralmente a Sendic?

—No, para nada. Siempre hemos sido respetuosos en la investigación. Las conclusiones las va a sacar el Senado, la Justicia o la gente. Sendic es uno de los principales responsables pero no es el único. Coya también lo es, Astori lo mismo. Si todos sabían, ¿por qué no se paró antes? Pedimos el acta de la sesión del Consejo de Ministros donde se dio esta discusión, y donde Astori y otros ministros dicen una cosa y Mujica dice otra.

—¿Considera que algunas de las decisiones que se tomaron, como el arreglo extrajudicial con Exor o las contrataciones directas de la agencia de publicidad y de la empresa de camiones para trasladar cal a Brasil fueron hechas para favorecer a amigos de Sendic?

—Hay decisiones inexplicables, contradictorias incluso. Por ejemplo, si a Exor se dice que lo invitó Pdvsa ¿por qué le tiene que pagar Ancap? Además, ¿para qué un intermediario sin licitación cuando el negocio es entre dos empresas estatales? La planta desulfurizadora se presupuestó en US$ 118 millones y se terminó pagando US$ 421 millones. En la planta de cal, donde hay irregularidades o ilicitudes manifiestas, se le dio en forma directa sin licitación el transporte de la cal a una empresa brasileña, con camiones brasileños, choferes brasileños. Además se le dio un adelanto a cuenta de flete. ¿Para qué? ¿Para que comprara camiones esa persona? La agencia de publicidad era la agencia de ALUR y se la contrató bajo protesta del Tribunal de Cuentas.

—El senador frenteamplista Leonardo De León, del grupo del vicepresidente Sendic, acusó al Herrerismo y a gente del Frente Amplio, como Astori, de querer llevar a Ancap a la privatización. ¿Es eso lo que se pretende?

—Claro que no. La mejor defensa de las empresas públicas es tenerlas bien. Los que dicen defenderlas, las funden, las llevan a esta situación.

—¿El Partido Nacional va a apoyar el proyecto de ley para la capitalización de Ancap?

—Para que suceda eso y para la recapitalización de Ancap tiene que haber requisitos. Y tiene que ver con medidas de gestión. Hay que cambiar el rumbo. Se habla de un nuevo ciclo, pero debe ser sin hacer las cosas como antes y sin los mismos protagonistas. Obviamente Coya debería descomprimir la situación dando un paso al costado.

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"Por acción o por omisión, todos en el gobierno son responsables", afirmó.

Álvaro DelgadoDANIEL ISGLEAS

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