Estaba envuelto en papel aluminio para evitar el escáner.
El "depósito" tenía 11 armas de grueso calibre y dos cargadores para pistolas Glock. A los policías de la Dirección de Crimen Organizado les sorprendió encontrarlas en el interior de un rancho cercano a la canchita del Rosario, en el barrio Campos de Trápani, envueltas en papel aluminio y dentro de bolsas de nylon.
Las armas estaban bien estibadas. Se trata de ocho pistolas calibres 22, 9 milímetros y 45, y tres revólveres calibres 357, 38 y 44.
La operación, denominada "Rosario", apunta ahora a conocer la ruta que es usada por los delincuentes para trasladar las armas hasta Brasil.
El propietario de las piezas es un narco de la zona. Es que ahora ya no se llevan camionetas de alta gama al país norteño y se las cambia por drogas, según se informó. La tecnología (GPS y rastreadores) permite ubicar rápidamente estos vehículos antes de que lleguen a la frontera.
Los traficantes hacen acopio de armas y las trasladan a Brasil, y allí las canjean por drogas indicaron investigadores policiales a El País.
A diferencia de Uruguay, en Brasil no se pueden comprar armas de grueso calibre como las pistolas Glock.
En armerías de nuestro país, el precio de una Glock ronda los US$ 1.000, mientras que en la frontera con Brasil cuesta aproximadamente US$ 3.000.
A medida que se ingresa más en territorio norteño, su precio aumenta. En Brasil es un delito el simple hecho de portar balas de grueso calibre dentro de un automóvil.
La Policía entiende que pueden existir otros lugares, en Montevideo, donde los traficantes guarden armas.
Antecedentes.
A mediados de 2015, efectivos de inteligencia policial estimaban que unas 300 armas automáticas fueron traficadas a organizaciones criminales de Brasil por policías del departamento fronterizo de Rivera.
Las bandas que compraban las pistolas y fusiles —se sospecha que una de ellas es el poderoso grupo narco denominado "Comando Vermelho"— las utilizaban luego en hechos delictivos como tráfico de drogas y asesinatos.
A la cárcel.
El jueves 6, el dueño del rancho donde estaban las armas guardadas (un miembro de la banda del traficante) fue detenido y trasladado al Juzgado Penal de 7° Turno, cuya titular es la jueza Adriana de los Santos. En la tarde del viernes, la magistrada y la fiscal Brenda Puppo dispusieron para el hombre, el procesamiento con prisión por los delitos de tráfico interno, receptación y tenencia ilegal de armas.
ALLANAMIENTO