Mujeres

Hace algo más de dos semanas, la cantante estadounidense Taylor Swift publicó sorpresivamente su octavo album de estudio: Folklore. La tercera canción del disco, titulada "the last great american dynasty" cuenta la historia de una excéntrica mujer de la vida real: Rebekah Harkness.

En ese tema, Swift habla sobre una mujer de clase media que se casa con el heredero de gran compañía petrolera que compran una casa de Rhode Island y en ella llevan una vida excéntrica que incluye a artistas y al propio Salvador Dalí. 

Esa casa de Rhode Island es ahora de Taylor Swift y la artista cuenta en la canción la historia de su propietaria anterior. 

Rebekah Harkness (195) fue una socialité estadoundiense que nació en una familia acomodada de St. Louis. Según informa Vogue, desde joven fue revoltosa y se encargó de hacer todo mal. 

Se casó tres veces y su segundo marido fue William Hale Harkness, heredero de la petrolera Standard Oil. Tras casarse, la pareja compró la casa de Rhode Island y la llamó "Holiday House", tal como narra la canción de Taylor Swift. 

A partir de su matrimonio, Harkness se convirtió en una figura de alta sociedad que incluso protagonizó tapas de revistas. Tuvo su propia compañía de Ballet, fue escultora y música. 

Su casa de Rhode Island fue escenario de fiestas en las que se cuenta que llenó la piscina con champagne Dom Perignon, le robó el gato —aunque Swift habla de un perro— al vecino y lo tiñó de verde o tuvo visitantes ilustres como Salvador Dalí. De hecho, Harkness murió en 1982 y sus cenizas reposan en una urna creada por el artista español.