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Una encuesta de la empresa Deloitte hecha en una muestra de 385 mujeres, de nueve países (Australia, Brasil, Canadá, China, Francia, India, Japón, Reino Unido y Estados Unidos) demostró cómo la pandemia de COVID-19 impactó trabajo y en su desarrollo profesional de las mujeres.

De acuerdo con el estudio parte de las mujeres encuestadas "la pandemia está alterando su equilibrio entre el trabajo y la vida y afectando su salud física y mental, y algunas incluso están cuestionando sus perspectivas profesionales actuales y a largo plazo".

Mientras que el 82% de las encuestadas respondió que la pandemia afectó de manera negativa sus vidas, el 70% de las mujeres que han experimentado estas disrupciones les preocupa que su crecimiento profesional pueda verse limitado como resultado y que el avance de sus carreras se enlentezca. 

Según las encuestadas, el 65% asegura que tiene más responsabilidades en el hogar como resultado del teletrabajo y un tercio sostiene que la carga laboral se aumentó. 

Además, las mujeres han visto triplicadas sus tareas como cuidadoras (de niños u otros miembros de la familia)  pasando al 48% según el mismo estudio.  De esas mujeres, el 58% sostuvo que se han tenido que ocupar de las tareas de cuidado de los niños y el 53% reporta que son los responsables de controlar la educación a distancia de los niños. 

Algunas mencionaron haber tenido que trabajar más horas de lo debido a raíz de la pandemia y otras "están haciendo malabares con las tareas adicionales de cuidado como resultado de las consecuencias relacionadas con la pandemia (es decir, cierres de escuelas, cuidado de familiares) mientras también trabajan a tiempo completo".

En ese sentido, el 29% asegura que siente que debe estar disponible más horas del día para su trabajo y que si no cumplen con ese requisito no podrán avanzar en su carrera. 

En primer lugar el estudio concluye que las acciones de lo empleadores serán claves para la evolución en las carreras de las mujeres. 

Para ello se deben seguir algunas recomendaciones como hacer más flexible la norma de trabajo, es decir que se pueda mantener tiempo de home office y también una oficina para cubrir todas las necesidades de las mujeres.

Además, se necesitan líderes con empatía y confianza para que apoyen a sus trabajadoras ante los desafíos que implica la situación de pandemia. 

Por otro lado, el estudio sugiere promover la creación de redes de mentoreo y sponsors como formas de aprendizaje y conocimiento que ayuden a acostumbrarse a las diferentes agendas y necesidades de las trabajadoras para que puedan potenciar sus carreras. 

También aconseja crear oportunidades de aprendizaje que puedan caber dentro de las vidas diarias de las trabajadoras, 

"Hacer que la diversidad, el respeto y la inclusión no sean negociables y asegurarse de que tengan experiencia en la cultura cotidiana de su empresa", señala el estudio que además establece que el 30% de las consultadas aseguran que existen comportamientos no inclusivos como microagresiones o exclusiones que no les permitirán avanzar en la empresa.  

Todas las encuestadas (385) trabajan tiempo completo en cargos que van de asistente ejecutiva hasta vicepresidenta de las empresas de al menos 1.000 empleados.