Sabor Express

Hoy les quiero hablar de esta fruta que hasta hace poco no conocíamos por estas latitudes pero que podés encontrar en oferta en esta época del año y es de las más dulces que existen.

Si no los ubicas mucho te cuento que a simple vista tienen una apariencia similar al tomate, pero con una pulpa gelatinosa y suculenta. Tiene un fuerte color amarillo anaranjado y son de intenso sabor dulce. Los caquis son una fruta típica de Asia y es en otoño cuando la encontramos con mayor oferta y mejor calidad; un dato curioso es que el otro nombre que se lo conoce es como Palosanto.

Algo característico de esta fruta es su sabor muy dulce, ya que contiene fructosa como azúcar principal pero también contiene sacarosa y glucosa. Cuanto más maduro es el caqui, más dulce y mayor proporción de azúcar tiene. Es fácil de comer y presenta un alto porcentaje de agua (alrededor de un 80%).

Junto con la banana, el caqui es de las frutas que contiene más carbohidratos. Debe ser por eso que nace el mito de que engorda pero como siempre les insisto en que es preferible no quedarse con el dato aislado de las calorías que contiene un alimento, debemos ver el todo. Aunque los caquis tengan su aporte calóricamente más elevado que una pera o una manzana, es una fruta tan beneficiosa para la salud que deberías incluirla en todo tipo de dieta, con los controles adecuados para patologías especificas.

Considerar una fruta de alto contenido calórico como poco recomendada es un concepto antiguo y falso, podríamos ponerlo en la lista de Demodé de la sección Domingo. Siempre será preferible consumir un caqui de postre, colación ó snack que las opciones de paquete menos sanas y más artificiales.

• Elevadas cantidades de potasio y de fosforo y bajas cantidades de sodio, es por eso que las personas hipertensas deberían incluirla por su poder diurético que presentan.

• Es una de las frutas más ricas en vitamina A y carotenoides que son los precursores de esta vitamina. La vitamina A es buena para prevenir problemas en la vista y que las mucosas realicen correctamente su función protectora.

• Fuente de vitamina C, la vitamina del invierno y que siempre asociamos a los cítricos. Los caquis cuando están verdes fundamentalmente, también son una excelente fuente. Y cuando hablo de vitamina C, nos referimos a su función de reforzar el sistema inmunológico, así como ayudante para absorber hierro (muy importante en dietas vegetarianas en las cuales es fundamental desarrollar estrategias para absorber el hierro adecuadamente). Estas dos vitaminas tienen propiedades antioxidantes que protegen contra distintos tipos de cáncer, enfermedades cardiovasculares, y degenerativas.

• El caqui es un excelente regulador intestinal, pues posee la particularidad que según el estado de maduración que presente lo podemos consumir para tratar situaciones de estreñimiento así como de diarreas. Presentan un componente ácido cuando están verdes aún, que le dan un toque más amargo y hacen que los caquis sean astringentes, y ayudan a tratar diarreas; por el contrario cuando están más maduros y con mayor contenido de azúcares y fibra son un excelente aliado para aumentar el tránsito intestinal.

Al momento de la compra hay que elegir los que estén colorados, con la piel intacta y con su tallo incluido. Lo ideal es que se encuentren maduros en el momento de su consumo.

Los caquis son de esas frutas que hay que conservar fuera de la heladera a temperatura ambiente para evitar que el frío deteriore su aroma, textura y sabor. Para madurarlos, podes ponerlos en un bol o bolsa de plástico perforada y donde no reciban luz directa, junto a otras frutas y una vez maduro conservar en la heladera hasta el momento de su consumo, que debe ser lo antes posible.

Un dato no menor es que el caqui se puede congelar ya sea entero o en puré. Te aconsejo que si congelas la pulpa agrégale jugo de limón para que al descongelar no pierda su color característico.

Lo ideal es como fruta fresca pero también va bien en jugos y smoothies, así como en purés o mermeladas para recetas de postres. Te dejo esta receta gluten free, vegana y de tan solo dos ingredientes para lucirte con un postre fácil y sencillo. Y como ya saben, ¡manden fotos!

(Receta vegana sin huevo, ni leche)

800 gramos de pulpa de caqui
60 gramos de cacao puro en polvo

Pelar los caquis y colocarlos en la licuadora, triturar hasta obtener una crema de caqui y añadir el cacao puro en polvo y volver a triturar hasta que se integre y quede una mezcla homogénea. Verter la preparación en las flaneras, tápalas con papel de aluminio o film y dejar en la heladera al menos unas seis horas o hasta el otro día (cuanto más frío mejor). Se puede servir con un topping de almendras o nueces picadas.

#extratips: Se puede añadir mayor sabor dulce con edulcorante, o añadir canela en polvo o vainilla.

Conocé a nuestra columnista

Lorena Balerio

Licenciada en Nutrición.Dicta charlas y talleres y promueve la alimentación real y saludable. Consultas personalizadas a domicilio y online

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