Publicidad

Danielle Chambaraud: la francesa experta en vinos que descubrió un tesoro en Uruguay

Compartir esta noticia
Danielle Chambaraud. Foto: Estefanía LEal
Nota a Danielle, Montevideo, ND 20210209, foto Estefania Leal - Archivo El Pais
Estefania Leal/Archivo El Pais

Actualidad

Desde Centro Vitis, un vivero ubicado en Durazno, abastece a viticultores nacionales y brasileños; además lanzó El Ceibo, un tinto compuesto por 60% Tannat, 20% Arinarnoa y 20% Marselan

Los franceses Danielle Chambaraud y Jean Pierre Bouillac, son propietarios de Centro Vitis, un vivero ubicado en El Carmen (Durazno), que abastece a viticultores nacionales y brasileños. Esta semana, ella visitó Uruguay para chequear la marcha de sus negocios locales y conversó con Eme.

Chamnaraud es coqueta, elegante y nada presumida. Esta mujer que está por llegar a los 50 años, habla español con fluidez y marca las erres, tal como se estila en su idioma natal.

Su principal empresa está en Blaye, una localidad cercana a Burdeos (Francia). Vignobles Bouillac comercializa vides y suma una bodega importante que cuenta con 100 hectáreas de viñedos, una cifra nada desdeñable en su país, donde algunos chateaux legendarios como Margaux o La Tour, no tienen esa extensión de cultivos??.

Su madre era propietaria de un viñedo y su padre falleció joven. Danielle debió ayudarla, alternando sus estudios con las tareas del campo, sobre todo en épocas de poda y vendimia. Al terminar liceo realizó cursos de gestión empresarial y de negocios con el exterior, lo que le permitió aprender y hablar varios idiomas. Su espíritu aventurero y las ganas de conocer el mundo la llevaron al Reino Unido, donde trabajó como guía turística. “Esta ocupación me permitió practicar el inglés y porque me encanta relacionarme con la gente y a esta altura no tengo dudas que puedo hacerlo muy bien”.

Con Jean Pierre se reparten los roles. Él maneja la producción y ella las finanzas, la administración y la relación con los clientes de Francia y del exterior. En Europa el vivero exporta sus plantines a mercados tradicionales como España, Italia y Portugal, aunque también a nuevos mercados en desarrollo como Rusia, India y México.

“He participado mucho en la promoción del vivero en el extranjero. Por ejemplo, tenemos media docena de clientes cerca de Crimea. Allí hay una zona con un microclima muy especial para el cultivo de la vid. Por la poca experiencia de ellos, Jean Pierre los visita para asesorarlos, ve la aptitud de cada suelo y según su composición, les recomienda cuáles clones, serán los que mejor se adaptarán, de cada una de las variedades elegidas”, señaló.

Danielle Chambaraud. Foto: Estefanía LEal
Danielle Chambaraud (Foto: Estefanía Leal)

El llamado de Uruguay

En Burdeos anualmente se realiza VINITEC, feria de insumos para bodegas y viticultores. En 1996 un empresario local visitó su stand y les contó sobre la reconversión de viñedos uruguayos.

“Insistió tanto que al final nos convenció que podía surgir un buen negocio. Jean Pierre vino a conocer esta nueva realidad. Le gustó mucho el gran interés de los productores por modernizar sus viñedos y, antes de volver a Francia, ya se había asociado con Pedro González y sus hermanos, también viveristas. Así comenzamos nuestra operación en Uruguay”, recordó Chambaraud.

Hoy Centro Vitis ofrece la ventaja de cumplir con dos funciones. Por un lado, es un negocio rentable que no sólo se apoya en el mercado interno, sino que desde Brasil también llegan pedidos.

“Es un mercado con gran potencial al que exportamos cada vez más y allá, a diferencia de aquí, hay una marcada preferencia por las variedades italianas como la Ancelotta, Nebbiolo o Prosecco”, reveló.

Por otro lado, Vitis es un campo experimental que brinda la libertad de cultivar y conocer a fondo, variedades novedosas y de gran futuro, como la Marselan y la Arinarnoa, que en Burdeos, debido a las estrictas reglas de las denominaciones de origen, no les permiten trabajar.

“Esta rigidez representa un gran inconveniente porque el cambio climático es una realidad, los veranos son más calientes, los racimos maduran de forma apresurada, sin dar tiempo a que los aromas logren su plenitud. Hoy tenemos algunos Merlot que alcanzan hasta 15 grados de alcohol, algo antes impensable y que los ubica lejos de la clásica elegancia que les dio tanto prestigio”, remacó.

Además de los distintos ensayos en el viñedo, los resultados finales de su trabajo se plasman en el vino. En El Carmen se genera una reducida producción de uvas que se aprovecha y con ellas se elaboran tintos de corte. Acuerdo mediante, instalaron equipos propios en la bodega de la familia Marichal y hoy de la mano del enólogo Sebastián Strada, ya está en el mercado El Ceibo, un tinto Tannat 60%, Arinarnoa 20% y Marselan 20% (se encuentra en Iberpark a $ 849 la botella).
?

Conocé a nuestro columnista
Eduardo Lanza EME
Eduardo Lanza

Ingeniero químico y experto en vinos. Su pasión lo ha llevado a visitar terruños, descubrir cepas y probar las más variadas etiquetas.

Es fundador de la Sociedad de Catadores. Escribe y enseña con el mismo placer que degusta un vino desde hace más de 20 años.

¿Encontraste un error?

Reportar

Te puede interesar

Publicidad

Publicidad